Rijkaard iguala tres récords negativos

No ha comenzado nada bien Frank Rijkaard al frente del Barcelona. Esa llama de esperanza de Laporta poco a poco se apaga. Los números no son nada buenos para el entrenador holandés, que poco a poco va igualando récords negativos.

Los datos hablan por sí solos. El pobre balance goleador preocupa. Al igual que en las temporadas 1971-72 y 1987-88, el Barça sólo ha conseguido anotar cinco goles en siete jornadas, quedándose, por tercer partido consecutivo, sin ver la portería rival. Este dato es la octava vez que se produce en los más de cien años de historia del club. Y la tercera plusmarca es que lleva cuatro partidos seguidos de Liga sin ganar en casa.

Pese a estar en plena reestructuración económica y haber prometido que no ficharán en diciembre, los dirigentes deberán gastar en la apertura de mercado. La posición está clara: ante la falta de gol, urge un delantero centro efectivo. Y son caros.

El técnico todavía tiene crédito

El Deportivo salió del Camp Nou como líder provisional de la clasificación, a la espera que el Valencia juegue hoy ante el Espanyol. Los gallegos suman ahora 18 puntos, nueve más que el Barça, que en siete jornadas se ha visto doblado por el primer clasificado. Pese a este dato, Rijkaard no corre peligro de ser despedido. El mensaje institucional de Joan Laporta y los suyos (que anoche no hablaron, como viene siendo habitual tras los partidos) sigue siendo de paciencia. Pero si las cosas siguen así, el holandés tendrá la cabeza en la guillotina. Rijkaard no pierde su talante tranquilo, pero habrá que ver si Laporta sigue pensando igual.