El Villarreal ya se ve jugando la UEFA

Fernando Roig nunca estuvo tan cerca de su sueño como en la noche de ayer. El Villarreal superó ampliamente al Hereenveen en el partido de ida de la final de la Intertoto y sólo una pesadilla podría frustrar la participación del conjunto amarillo en la próxima edición de la Copa de la UEFA.

Benito Floro planteó el partido para que su equipo esperase agazapado al cuadro holandés y saliera al contragolpe aprovechando la velocidad de sus delanteros. En esta ocasión fue Sonny Anderson el punta sacrificado y la apuesta no le pudo salir mejor al técnico asturiano. A los doce minutos de comenzar el duelo, Coloccini, perfecto en la demarcación de mediocentro, robó el esférico en el círculo central, abrió a Calleja, quien hizo la pared con Arruabarrena y su disparo posterior llevó el 0-1 al marcador.

El gol supuso un acicate para el Hereenveen, que intentó reaccionar a base de balonazos hacia el gigantón Sibon, cuya torpeza sólo era equiparable a su enorme estatura. Sin embargo, en uno de esos centros con destino desconocido, Ballesteros desvió el balón con el pie y la inesperada trayectoria sorprendió totalmente a Reina.

El empate no trastocó los planes del Villarreal, que sabía muy bien lo que quería y cómo lo quería. Los de Floro siguieron esperando a los holandeses en su campo, intentando aprovechar el mínimo error de su adversario. Fue así como José Mari recuperó un balón y su pase entre dos defensores fue aprovechado magistralmente por Víctor, picando el balón ante la salida desesperada del guardameta Vonk.

En la segunda parte, el cuadro castellonense cambió por completo su estrategia de juego. Se dedicó a controlar la posesión del balón y a marear a los jugadores locales, ante la desesperación y los pitos del público local. Ahora, los de Floro deben rematar su gran faena en El Madrigal el próximo día 26. Sólo en la peor de las pesadillas de Roig cabría esperar un desenlace diferente.