Nos hace soñar

De todos los Tours de la era Armstrong, la de ayer fue la jornada de montaña más intensa y bonita que he podido vivir. Ver a Armstrong marcharse en solitario en la primera etapa dura no emocionaba. Y que la jornada fuera tan vibrante se lo debemos a los españoles. A un Iban Mayo que es el corredor con más futuro del pelotón. Era la segunda vez que desafiaba al americano tras la Dauphiné y le ha ganado. Pero antes quien dinamitó la carrera fue un Beloki muy agresivo.

Joseba demarró a Armstrong hasta en cinco ocasiones y tuvo que ser el estadounidense en persona el que saltara para cogerle. Les ha puesto las pilas a todos varias veces. Las fuerzas de Lance no son las mismas de otros años y se ha visto obligado a correr con inteligencia. Si está a tope no le hubiera perdonado a nadie. Ni siquiera a Iban. No es el que era. Y los nuestros están mejor que otras veces. El enemigo son los españoles y tienen artillería y terreno por delante para atacarle en este Tour tan abierto.

Esto no significa que haya que dar por acabado al campeón del Tour. Si controla a Beloki en la montaña, en la crono siempre le tendrá ventaja. Pero ahí estamos. Mayo es un campeón en potencia que nos hace soñar. Y otros, como Mancebo y Zubeldia dan la talla. Un Tour de color español.