La cantera y los millones

Gusta ver que la cantera del Espanyol va creciendo cada día. Es bonito repasar las alineaciones del equipo y ver que la llama que encendió Paco Flores continúa viva. Los centrales del equipo son un ejemplo. Serios, contundentes y profesionales. Lo tienen todo. Además, otro dato destacable es que en esa posición hay jugadores esperando su oportunidad. Dani Jarque será el siguiente, aunque Carlos García también sube con fuerza. Sería injusto olvidarse de David Català, aunque los técnicos de la casa parece que no tienen un futuro muy esperanzador para él.

Lo que no gusta ver es que el vestuario está molesto. El que a final de mes no lleguen los cobros prometidos, molesta. Mucho. Muchísimo. Todos, pero todos, se comprometieron con Javier Clemente a luchar por la permanencia. Pasearse por Montjuïc es llevarse la impresión de que la plantilla está con ganas de acabar con la pesadilla de la temporada y dar una alegría a la fiel afición.

Yesa es la clave. Si los dirigentes son buenos para salir en la foto, también lo deberían ser para pagar. Si se comprometieron en su día, ahora que paguen. El equipo ha cumplido y parece que desde los despachos no lo están haciendo. Es una pena acabar el curso con esta sensación de impago.