Primera final

Primera | Real Madrid - Málaga

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El Madrid recibe al Málaga con la consigna de ganar los cinco partidos que le quedan. Los malagueños aspiran a la UEFA. Morientes vuelve a la delantera

Lo que ahora es una minicrisis controlada puede convertirse hoy en una megacrisis incontrolada si el Real Madrid no gana al Málaga en el Bernabéu. Si eso ocurriera sería, casi con seguridad, el adiós a la Liga y nos quedaría un mes por delante de intrigas y rumores, que sumado a la campaña electoral podría provocar en nosotros daños irreparables. No es un partido cualquiera, como se ve.

Será un examen a todo lo que genera dudas, a saber: Hierro, el doble pivote, la forma física de Raúl, la forma física de todos los demás, la capacidad de superación y Vicente del Bosque. El caso del entrenador es el que me parece más peliagudo pues al final la diversificación de los pitos siempre tiende a confluir en el banquillo. Y sería injusto, porque aunque es verdad que Del Bosque se equivocó en Turín (también Figo), no se le puede hacer responsable de las distracciones en la Liga ni de la incompetencia acomodaticia de algunos suplentes que en su mayoría no fichó él.

Del Bosque no es el problema, es precisamente lo contrario: un no generador de problemas. Si se ficha a un entrenador estrella esto será OK Corral. El verdadero problema es el desequilibrio entre ataque y defensa, provocado por la abundancia de cracks (poco sacrificados, Raúl aparte) y que convierte al Madrid en un equipo incapaz de protegerse cuando pierde el balón. Solución: un central y un medio centro, que corran el doble y que tapen el triple; comprar huevos, que diría el añorado Stielike. Por cierto, me ha salido un mitin.

Pero vayamos al partido de hoy. Guti, que estaba tocado, será titular y volverá al doble pivote acompañando, me temo, a Flavio. Sigo diciendo que Cambiasso aporta muchas más cosas, como se vio al principio de la temporada. Y recuerdo que tiene 22 años, aunque no disfrute de la indulgencia de otros de su edad. Morientes regresará a la delantera y Raúl a la media punta (como debió ser en Turín). Será fundamental su participación, tanto como la de Figo, que está en deuda.

El Málaga será como tantos rivales que llegan silbando al Bernabéu para que nadie se fije demasiado. Es un equipo alegre que aspira a la UEFA, pero que pierde mucho chiste sin Darío Silva y el uruguayo no estará, sólo Dely. Cuenta, sin embargo, con un puñado de ex madridistas a los que les quedaron cosas por demostrar (Contreras, Sandro, Valcarce, Manu...), por no hablar de Fernando Sanz, que, entre otros parentescos, es central, para que la herida escueza más.

Esta tarde viviremos un juicio sumarísimo a todo lo que se mueve, y a lo que no, como Hierro. Será el primer examen, porque vendrán peores. Comprobaremos hasta dónde llegó la herida. Veremos cómo se lo toma el Bernabéu, al que se le suele reprochar cierta pereza en los aplausos, que no en los pitos. A partir de su reacción sabremos quién va ganando estas elecciones.