Himno canalla

Con ron y whisky a granel para calentar las gargantas y unas buenas dosis de fervor rojiblanco, una nutrida representación de restauradores, artistas, toreros y periodistas acudimos a la llamada del irrepetible Sabina y de su alter ego Pancho Varona para jalear los sones del himno del Centenario. Muy alejado de la pomposidad con la que el madridismo musicalizó su onomástica, Sabina, con su estilo canalla y descarado y con su voz desgarrada de tanto vivir, pone música y letra a este inexplicable sentimiento colchonero. Y lo hace con elegante sencillez, con esa facilidad que tiene para atrapar las sensaciones más hermosamente cotidianas.

Cuando dice, "qué manera de palmar", no solo es capaz de elevar a rango de poemario el lenguaje de la calle, es que además acierta de lleno con nuestra idiosincrasia.Y es que no podemos perder de cualquier manera. Nuestras derrotas tienen que ser especialmente dolosas, o no recuerdan la maldita final de la Copa de Europa o la absurda final de Copa ante el Español. El himno se va a convertir en la joya del Centenario. Letras que son el mejor homenaje a los jugadores que nos han hecho grandes. Acordes que actúan de bálsamo ante tanto infortunio.