Un ciclista de ataque

Ha ganado el mejor: Iban Mayo. Impresionante. El primer día ya se vio que tanto él como el equipo Euskaltel eran los más fuertes, pero el problema es que tuvieron ciertos miedos. Y para ganar una carrera como ésta, tienes que arriesgar. Eso es lo que hizo ayer el vizcaíno. En el sector matinal hemos presenciado ese ciclismo que últimamente no se ve nunca, el ciclismo de ataque. Mayo ha sacado su temperamento en la última subida y en el descenso. No estamos acostumbrados a ver gente así, pero es la única manera de conquistar grandes triunfos. Con esta actitud se labró la victoria eliminando a Dario Frigo y a todos los rivales menos a Tyler Hamilton.

Eso provocó que la contrarreloj se quedara en un mano a mano entre el vasco y el americano. Hamilton le ganaba al principio, pero Mayo, sin ser un especialmente, se ha entregado en la subida y, sobre todo, en un descenso que era muy peligroso. Ha estado soberbio. No cabe duda de que la lluvia ha influido en el resultado, porque ha obligado a arriesgar. Y sólo han sacado fruto quienes lo han hecho. Además, me llevo una grata impresión de toda esta nueva generación de españoles. Al margen de Mayo, aquí han sobresalido Ángel Vicioso, Samuel Sánchez y Alejandro Valverde. Este último podría haber luchado más por el triunfo con un mejor equipo.