Motivos de orgullo

Los cien años son de todos, de muchas generaciones de futbolistas, de muchas generaciones de aficionados, de tantos y tantos dirigentes. Todos, unos más y otros menos, con aciertos y errores, como en todas las facetas de la vida, han aportado su granito de arena para que el Atlético haya llegado hasta aquí. Jesús Gil era ayer en la Casa de Correos de Madrid un presidente orgulloso y agradecido que se acordó de sus antecesores en el cargo y que tuvo palabras de elogio para una afición que ha tenido un comportamiento ejemplar en los más difíciles años del Atlético. Gil tenía motivos para sentirse orgulloso.

Muchos de los motivos de orgullo estaban allí, rodeando al presidente del club, con más canas y más kilos. Extraordinarios futbolistas que forman parte del mejor álbum rojiblanco. Rivilla, Calleja, Adelardo, Gárate, Miguel, Collar, Pereira, Heredia...Leyendas. Son ellos quienes siguen en la retina de generaciones de atléticos. El Centenario servirá para que la afición haga un ejercicio de nostalgia y rinda homenaje a sus ídolos. Gil dio el pistoletazo de salida a la fiesta y el Ayuntamiento y la Comunidad fueron tomadas por la tribu rojiblanca. Todos fueron atléticos por un día.