Manfredini: el niño de los misioneros

Primera | Osasuna 1 - Real Madrid 0

Manfredini: el niño de los misioneros

Manfredini: el niño de los misioneros

Christian Manfredini, nacido en Costa de Marfil, fue adoptado con 4 años por una familia italiana.

Manfredini nació en Port Bouet (Costa de Marfil) el primero de mayo de 1975. A los cuatro años el destino le tenía preparado un giro en su vida: un misionero medió para agilizar su adopción por parte de Doménico y María, un matrimonio italiano de Battipaglia.

En el país del Calcio, pronto le impregnaron sus padres adoptivos el gusto por el fútbol. Desde chavalín destacaba por su velocidad y habilidad con el balón, y no tuvo problemas para que el Battipaglia fuera su primer equipo federado. Los ojeadores de la Juventus se lo llevaron al torneo Primavera cuando tenía trece años y allí se le abría un horizonte sensacional, pero no cuajó, por lo que fue cedido al Torino.

En Turín tuvo más suerte. Ya con 18 años gustó a los técnicos y compatibilizó su presencia en los juveniles con las convocatorias con el primer equipo. Pero al final no se hizo con un sitio entre los grandes. Pasó por una larga lista de clubes menores: Pistoiese, Viterbese y Cosenza, para llegar al Génova en 1999. Éste fue el club puente para su llegada al Chievo Verona, en el verano de 2000, con 25 años. En esa temporada el Chievo inició su fulgurante ascenso desde la Serie B a la máxima categoría del Calcio, gracias en buena parte a Manfredini que se convirtió en una de las grandes sensaciones de la categoría.

Este éxito provocó que un buen puñado de equipos italianos siguieran muy de cerca a este buen extremo izquierdo, brillante por su sprint y dribling con el balón pegado al pie. La siguiente temporada, el Chievo hizo un gran año en la Serie A, lo que le valió a Manfredini (junto con su compañero de equipo Corradi) para fichar por uno de los grandes: El Lazio.

Sin embargo, Mancini no contó con él, porque la banda izquierda del Lazio se la regaló a César y Sorín, taponando la proyección de Manfredini. El pasado mes de diciembre el Osasuna se interesó por la cesión del jugador, que dispone de pasaporte italiano. El secretario técnico Ángel Martín González, actual segundo entrenador, le avalaba. Y el Lazio aceptó cederlo con opción de compra hasta el próximo 30 de junio.

Christian Manfredini está casado con Mónica desde hace dos años y tuvo un hijo hace cuatro meses. Le gusta la música de todos los géneros, adora Francia para vivir, Bolonia como ciudad, y la pasta es su plato diario. No habla aún castellano y está enamorando a la ciudad de Pamplona con su humildad y su entrega. Seguro que el gol de ayer al Madrid tendrá eco en toda Italia.