Juande juega al despiste táctico

La necesidad de encontrar un esquema táctico que dé los resultados esperados es la preocupación número uno de Juande Ramos. La extrema necesidad de sumar después de las tres derrotas sufridas ha hecho pensar al manchego un radical cambio ofensivo en el equipo y en el sistema. Pero en la mente de Juande no cabe la idea de que el rival se pueda llegar a enterar por los medios de comunicación y ayer en el entrenamiento probó un dibujo (el 4-2-3-1) que no será el que utilice el domingo ante el Sevilla. Para ese encuentro, recurrirá al 4-4-2 y apostará de nuevo por el binomio Tamudo-Savo Milosevic, la pareja que antes de comenzar la temporada generaba tantas ilusiones al perico.

En la prueba matinal de ayer, Juande alineó en el teórico equipo titular a los mismos que en el Camp Nou, con dos excepciones: Roger García ocupó el lateral izquierda de Iván Amaya y Toni Soldevilla se situó en su puesto de central en detrimento de Alberto Lopo. No era esta una solución descabellada, pero será el jugador cedido por el Atlético quien ocupe el lateral: no cree que el problema esté en la defensa, sino del centro del campo en adelante, que es donde estarán los principales cambios. En principio se había hablado de la posibilidad de que usara el 4-1-4-1 que ya había puesto en práctica con éxito en el Betis. Pero Juande tiene en la manga algo más clásico: el 4-4-2.

De este modo, Argensó parece que será titular por dos razones: por el buen encuentro que hizo ante el Barça y porque Sergio Sánchez acaba de salir de una lesión. En la zaga no se esperan cambios y en el centro del campo, además de la variación táctica, habrá diferentes caras: Maxi estará en la derecha, Morales y De la Peña en el centro, y Roger o Luque por la izquierda. Con esta disposición y estos futbolistas lo que pretende Juande es tener a peloteros que alimenten de balones a los matadores Tamudo y Milosevic.