Escaladores contra rodadores

Este fin de semana se disputa en Madrid la Clásica de Alcobendas en tres etapas de perfiles para todos los gustos. Hoy, oportunidad para los velocistas en un recorrido casi llano (Alcobendas-Collado Villalba, 150 km). Y el domingo, doble sesión; por la mañana, turno para los escaladores con la ascensión a Navacerrada desde Collado Villalba (63 km); y por la tarde, revancha de los rodadores en la contrarreloj de Alcobendas (9,7 km).

Una fórmula que lleva ya años explotándola la Sociedad Tour de Francia en su Critérium Internacional, y que desde el año pasado, al cogerla Unipublic, se viene ensayando en esta carrera. En ambos casos con un buen resultado, ya que elimina las etapas de relleno. La Vuelta a Castilla y León estudia adoptarla el año que viene y no vendría mal que el ejemplo cundiera en otras carreras. Si el ciclismo está en crisis, hay que potenciar el espectáculo y acabar con las etapas-siesta: escapada de un modesto, control del equipo del líder y llegada en pelotón. La historia interminable mil veces contada.

Dieciséis equipos en la salida (144 corredores), los seis españoles y doce extranjeros, entre los que destaca el Cofidis francés, en este duelo de escaladores (Mercado, Mancebo, Moncoutie, Laiseka..) contra contrarrelojistas (Olano, Hruska, Iván Gutiérrez, Alberto Martínez, Zubeldia). Pero hoy, ocasión para los sprinters (Perdiguero, David Fernández, Barbosa...).