El Maru, campeón de Liga

Iban 21 minutos de partido, Martin Kafka, el descendiente del famoso novelista checo, acababa de marcar su segundo golpe de castigo, el Maru (Moraleja Alcobendas Rugby Unión) se colocaba con 6-0, cuando en los altavoces del Polideportivo Alcobendas anunciaron que el Dulciora había perdido su partido en Sevilla frente al Montes. El Maru era ya campeón de Liga pasara lo que pasara.

Los jugadores, que estaban a lo suyo, ni lo oyeron. Pero el partido cambió a partir de ahí. El Madrid 2012, equipo nacido este año de la fusión del Canoe y el Liceo y por el que apostó la candidatura olímpica madrileña, pasó de dominado a dominador. Llegó con empate (6-6) al descanso y se puso por delante (9-16) gracias a dos ensayos de Sereley Bobo, impresionante jugador de las Islas Fidji. (¿Cómo se puede correr así con 120 kg?)

"En partidos como este se ven los equipos campeones. Jugando peor hemos sabido remontar", reconoció sinceramente Santiago Santos, técnico del Maru. En un cuarto de hora final vibrante, los de Alcobendas se llevaron el partido con un ensayo de Ebbett, y la transformación y un golpe castigo por parte de Kafka: 19-16 y el Maru dio brillo a su título con una victoria ante un gran rival, que mereció más.

Patrocinadores que desgravan. Con sólo dos años en División de Honor ya es campeón, gracias a una moderna planificación y una mejor financiación que le permite tener un presupuesto de 85 millones de pesetas. El truco está en que sus patrocinadores pueden desgravar a Hacienda al hacer sus donaciones a través de la Fundación Alcobendas (Fundal). Y con ello, su estructura es ahora más profesional. "Queramos o no, ese es el futuro", dijo un miembro del Madrid 2012.

Por medio de Santiago Santos, que es primo hermano de Butragueño, y del mismo ayuntamiento de Alcobendas, el Maru ha tenido negociaciones con el Real Madrid para intentar que patrocine a este equipo de rugby, y también a los de hockey sobre patines y balonmano de la localidad. Las conversaciones están paradas de momento.

El Maru, como campeón se aseguró una de las dos plazas de la Copa de Europa de clubes 2003. "Hace ocho años, cuando cogí a este equipo en regional, era un sueño llegar a campeón de Liga. Pero creía en ello", comentó Santiago Santos, el técnico. "Ahora mi sueño es llegar a una final de la Copa de Europa. Quizá en otros ocho años".