Ciclismo | París-Roubaix
Johan Museeuw reina en el Infierno
El León de Flandes volvió a ganar la gran clásica por tercera vez.
Para celebrar la edición número cien, que mejor que el triunfo del belga Johan Museeuw, el ciclista que ha escrito las mejores páginas de la historia reciente de la clásica más dura del ciclismo, la París-Roubaix, El Infierno del Norte.
El León de Flandes, apodado así por sus tres triunfos en el Tour de Flandes, ya tiene otros tantos en la París-Roubaix. También es El León del Pavés. Se queda a uno de Roger de Vlaeminck. Se quería retirar al final de este año, pero tras su triunfo de ayer dejó entrever que lo mismo le vemos el año que viene intentando igualar a De Vlaeminck.
Museeuw ya ganó en 1996. Llegó con Tafi y Bortolami, compañeros del Mapei, que no le disputaron el sprint. Y en 2000 entró levantando su pierna izquierda en recuerdo de la lesión que sufrió aquí en el 98 y que le pudo costar su amputación, al caer e infectársele la herida con excremento de caballo. Pese a todo, él se siente a gusto en el Infierno.