Debe irse del Mapei

Debe irse del Mapei

Si hay una carrera de la Copa del Mundo en que dependes del equipo, esa es la Milán-San Remo. En las demás siempre hay tramos de pavés, muros o pequeños puertos que colocan a cada uno en su sitio. En la classicissima son casi siete horas de carrera en las que hay codazos desde el banderazo inicial para tener colocados a los favoritos entre los de cabeza. Cipollini y Zabel, como anteriormente los tuvieron todos los campeones, poseen gregarios para hacer ese trabajo y para colocarles en los últimos cien metros sin gastar fuerzas. Freire no. Él está abandonado a su suerte y depende de su inteligencia y de su magia.

Oscar aún no ha renovado con el Mapei para el año que viene y pienso que debía pensar seriamente en dejar este equipo. Bien es verdad que el Mapei le ha mimado. Quizás ningún otro equipo hubiera aguantado tan pacientemente sus lesiones, pero en el plano deportivo sale perdiendo. En cualquier otro grupo, sobre todo italiano, tendría a todo la gente a su disposición. Lo mismo perdía dinero, pero ganaría más carreras. El Mapei es el mejor equipo del mundo económicamente, pero el peor organizado. Tiene cuatro directores y ninguno es malo, pero carecen totalmente de autoridad. No se atreven a levantar la voz a ese numeroso plantel de figuras consagradas que van a lo suyo. Y no hablo de Bettini, si no de todos los demás.