El Ademar se resiste a perder comba

Fue una pena que un partido tan intenso e interesante se quedase sin emoción a las primeras de cambio, pero es que el Ademar salió como un vendaval, tomó ventaja y todo invitaba a sestear o a ver un paseo. Incluso los propios jugadores locales se lo llegaron a pensar, como en aquel contragolpe claro en el que Krivoslikov, saltando desde los seis metros, cambió de dirección para hacerle una colgada a Juanín García, el otro extremo, que detuvo Rodríguez.

Cuando el Cantabria se asentó, un poco tarde, hubo partido de verdad, duro y entretenido aunque sin la incertidumbre de un marcador apretado, porque el Ademar siempre vivió con una ventaja sustancial.

El Ademar necesitaba un triunfo claro para olvidar lo antes posible su derrota ante el Barcelona. En la primera vuelta de la Liga fue el único de los cuatro grandes que perdió todos los choques con los rivales directos. Por eso se ha rezagado, pero aún tiene el liderato a tiro y su juego, siempre tan sobrio, es sólido aunque falten piezas (ayer Bartok).

Un problema añadido para los locales, que pensaban también en esa Copa Asobal en León este próximo fin de semana, fue la lesión de Colón: reaparecía tras sus problemas en el codo, y con los mismos síntomas se fue al banquillo.

Quien sí acaparó todos los golpes del partido fue el extremo Rentero, que mostró su pundonor con esa imagen de guerrero con la frente bañada en sangre.

Árbitros: Gorjón y Ríos (Madrid). Excluyeron por dos minutos a Ordóñez, Prendes y Errekondo por el Ademar y a Arhenius, Pellitero y Reñones por el Cantabria.