La rítmica derrotó al tenis en Madrid

"En la oficina Madrid 2012 no ha sido una sorpresa, porque conocemos el interés deportivo general y la respuesta de los aficionados, pero digamos que los políticos se han sorprendido de que la respuesta del público en el Mundial de rítmica haya doblado con creces al de la Copa Federación de tenis", sostenía ayer en el Ifema un importante cargo de la oficina olímpica madrileña, preocupado por "recoger la instalación".

La realidad es que el Mundial de rítmica superó las previsiones, y la Copa Federación se quedó lejos de lo previsto. Por ejemplo, con idénticos días de competición, el mismo aforo (5.842 espectadores) y precios semejantes, la rítmica puso el cartel de no hay billetes el fin de semana, mientras que el tenis en el mejor de los casos llegó a la mitad del aforo. Y entre semana, la relación es dos espectadores a uno para la gimnasia.

Otro aspecto importante, en el de la comercialización, mientras el Mundial de rítmica pudo vender absolutamente todos los espacios publicitarios en sus pistas de competición, la Copa Federación ha dejado demasiados huecos, y casi todas las vallas eran institucionales.

Eduardo Ayuso, Director de Promoción Deportiva de Madrid 2012, tiene su propia perspectiva ante lo que se considera, en comparación de deportes, éxito frente a fracaso: "No se puede hablar de fracaso de un deporte respecto a otro. Simplemente, que hay deportes a los que mediáticamente se les da menos relieve y que, sin embargo, demuestran una gran capacidad de convocatoria. Por ejemplo, el Mundial de rítmica también vino acompañado de una excelente respuesta en la televisión, con cerca de un millón de espectadores diarios".