Rivalidad positiva

Rivalidad positiva

Con la presencia de Fernando Torres en el banquillo de Salamanca ha llegado la primera polémica al equipo rojiblanco. La perla atlética debe ser un titular indiscutible en el once titular de Luis Aragonés. Los seguidores lo tienen claro, pero hay que valorar en su justa medida las decisiones del banquillo. No respetar a los jugadores que han estado a un nivel excelente como en el caso de Correa provocan las polvaredas en el vestuario. Luis es un mago a la hora de manejar la psicología de la gente de su plantilla.

El gran beneficiado está siendo el propio Atlético. Contar con cuatro delanteros como Diego Alonso, Correa, Torres y Dani está al alcance de pocos equipos, incluida la Primera División. Luis les está metiendo candela y esto provoca que los cuatro salgan al campo con la obsesión del gol en sus botas. Se anuncia una temporada más que competitiva para los puntas rojiblancos y este hecho va a provocar que el ascenso del equipo se consiga con un fútbol ofensivo. Lo que si merece ser destacado es el hecho de que nadie ha levantado la voz. En el Calderón han cambiado las cosas de manera ostensible. Luis ha impuesto sus galones y los cachondeos de otras campañas han pasado a mejor vida. Fernando Torres está muy bien aconsejado, sabe que tiene que seguir aprendiendo y que si ahora saca pecho se lo pueden romper. Lo importante es que el Atlético sea el gran beneficiado.