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Primera | Zinedine Zidane

"Sólo necesito tranquilidad y estar a tope físicamente"

Dentro de muy poco se verá al verdadero Zidane. El crack francés ha decidido aislarse del entorno para poder concentrarse en los terrenos de juego.

Actualizado a
Zidane se confesó ante los medios de comunicación.
ÁNGEL MARTÍNEZ

No hay motivo para que suenen las alarmas. Dentro de muy poco se verá al verdadero Zidane. El crack francés ha decidido aislarse del entorno para poder concentrarse en los terrenos de juego. Para él, el fútbol es una combinación entre el estado de ánimo y la buena forma física.

-¿Le sorprende la expectación que va levantando a su paso desde que llegó a Madrid?

-Al principio he de reconocer que me chocó bastante, pero ahora ya estoy acostumbrado. Poco a poco voy conociendo más la ciudad y el equipo.

-¿Le pesa ser el centro de atención del Real Madrid?

-Soy el centro de atención de todos. Desde que llegué, no sólo la Prensa española está encima mía, sino la francesa, la italiana... Pero ya digo que al principio me pareció algo normal porque yo era la novedad, aunque esto no tiene visos de cambiar. Lo realmente importante es lo que uno haga dentro del campo.

-¿Le cuesta trabajo concentrarse en el fútbol con tanto ajetreo a su alrededor?

-Es un poco complicado. Sólo quiero pensar en que ahora empezaremos a jugar dos partidos por semana para centrarme en el juego de mi equipo. Estos dos meses han sido difíciles para mí, pero me voy habituando con el paso del tiempo. Nunca pensé que la expectación que el fútbol causa en Madrid fuera tan grande. Turín era una ciudad más tranquila.

-¿Cree que en España se acosa a los jugadores más que en Italia?

-Pienso que el acoso es igual en los dos países, pero tengo la certeza de que en el Madrid es mayor. Es un club al que la mayoría de la gente del país ama de corazón. El equipo tiene mucha cobertura en la Prensa y la afición siempre está encima. En Italia es anormal que la gente pueda ver los entrenamientos como sucede aquí. Pero no pasa nada, me estoy habituando. He fichado por muchos años, no por dos meses.

-Entonces, ¿cuánto tiempo queda para que la gente pueda ver al mejor Zidane?

-Lo importante es que estoy muy cómodo con el equipo. Mis compañeros me están ayudando en todo lo posible dentro y fuera del campo y eso me hace las cosas más fáciles. Pero es evidente que ahora mismo es un poco complicado para mí rendir al máximo nivel.

-¿Y qué es exactamente lo que le falta para mostrar su verdadera cara?

-Sólo necesito tranquilidad y estar al cien por cien físicamente.

-Parece insistir mucho en que necesita tranquilidad...

-Por supuesto que sí. Todos la necesitamos. El único problema es que yo juego en el Real Madrid. Mi vida siempre ha sido tranquila fuera del campo y quiero que siga siendo así. Sé que debo adaptarme, pero quiero que se hable de mí por lo que ocurra en el terreno de juego. Ahí no tengo ningún problema.

-¿Cree que el Madrid se ha esforzado lo suficiente en proporcionarle la tranquilidad de la que habla?

-No tengo ninguna duda. Todos se han volcado conmigo desde que llegué. Los jugadores, el presidente y las personas del club que han estado a mi lado. Con la gente allanándome el terreno de esa manera muy pronto alcanzaré mi mejor nivel

-¿Qué le parecen las críticas que se vierten sobre su persona desde Barcelona?

-No me interesa lo que se diga desde Barcelona. De hecho, no suelo leer la Prensa deportiva, así que no sabía nada de las críticas de las que usted me habla. Sólo me preocupa jugar bien en el Madrid. Yo estoy tranquilo por que desde que llegué sabía que necesitaría un tiempo de aclimatación.

-Sobre el campo da la sensación de que usted no termina de acostumbrarse al juego de sus compañeros...

-Es normal que esto ocurra al principio. Todos necesitamos de un periodo de adaptación y el mío está muy cerca de terminar. Admito que no he jugado como todos esperaban de mí ni como yo sé que puedo hacerlo, pero no me preocupa porque conozco mis cualidades y todo cambiará. Sé para lo que me trajeron y poco a poco ganaré en confianza.

-¿Cree que el problema puede centrarse en la posición que ocupa en el campo?

-No creo que se trate de eso. Entenderse con futbolistas de tanta calidad es muy fácil. Lo único que sucede es que no estoy bien físicamente y estar a tope es esencial para que pueda desarrollar el fútbol que llevo dentro.

-¿No piensa que se le está exigiendo demasiado desde que llegó al equipo?

-Seguro que sí... qué otra cosa se podía esperar. La gente tenía muchas expectativas puestas en mi llegada, como es lógico, después de que mi traspaso costara tanto dinero. Sé que haré grandes cosas en el Madrid porque todavía me queda mucho por delante y los inicios titubeantes quedarán atrás. Siento decir que en estos momentos todavía no es posible, pero voy a poner todo mi empeño en que no transcurra mucho tiempo.

-Mañana debutará en el Bernabéu en Liga. ¿Tiene cierta psicosis después de la cantidad de patadas que le dieron en Valencia?

-El tema de las patadas no es nuevo para mí. Siempre he recibido muchas, en Italia, con la selección francesa... Si los marcajes no fueran tan duros sería muy fácil jugar al fútbol, pero es una pena no poder disponer de más libertad.

-¿Ha encontrado ya las diferencias entre el juego de la Liga y el Calcio?

-Llevo poco tiempo y es difícil de decir. El nivel de competitividad es el mismo, pero aquí manda la libertad del juego ofensivo. En el Calcio los entrenadores se preocupan más por la defensa. El juego se estructura desde ahí.

-El martes su equipo juega con el Roma. ¿Le dará consejos a Vicente del Bosque?

-Es un equipo muy difícil de batir. No tiene puntos débiles. El empate sería un buen resultado. Tienen un equipo muy compensado pero el peligro llega desde arriba, con Batistuta, Totti o Candela, pero el Real Madrid puede ganar a cualquiera.

-Usted hizo un gol a el Roma la temporada pasada que podía haberle dado el campeonato a su equipo... ¿si hubiera sido así, estaría jugando ahora en Italia?

-Es muy difícil decirlo ahora, cuando las cosas ya están hechas. Dos meses antes había dicho que si la Juventus no ganaba un título mi deseo era cambiar de equipo.