Sorpresa con sabor español: Swiatek cae contra Zheng
La polaca, número uno de mundo y favorita al oro, cede contra la jugadora china, entrenada por Pere Riba, en las semifinales olímpicas.
A la espera de lo que puedan hacer tanto Carlos Alcaraz como el dobles conformado por Sara Sorribes y Cristina Bucsa, este jueves, el tenis español abrió boca una pequeña alegría en los Juegos Olímpicos. Fue en la gran sorpresa del día, la derrota de la número uno del mundo y gran favorita al oro, Iga Swiatek, frente a la china Qinwen Zheng, sexta cabeza de serie, que sorprendió con un 6-2 y 7-5 en 1h51. La jugadora asiática, de esta forma, se aseguró, como mínimo, la plata. Y lo hizo con un español a su lado, Pere Riba, con el que lleva trabajando desde 2021. El año pasado, después de Roland Garros, separaron sus caminos. Para el presente, sin embargo, volvieron a unir sus destinos. Ahora, son medallistas olímpicos conjuntamente.
Lo celebraron a lo grande. Especialmente, una Zheng que, después de alcanzar la final del Open de Australia este año, consiguió la victoria más importante de su carrera. La china no había ganado nunca a Swiatek en sus anteriores seis enfrentamientos y lo hizo de forma imponente, tras un primer set poderoso, en el que Iga acumuló 36 errores no forzados, y un segundo parcial en el que supo manejar la reacción de la líder del ranking mundial, algo nunca sencillo. Aún más, en tierra batida y en la Philippe Chatrier, pista que ya ha coronado a la polaca con cuatro Roland Garros. Esta vez, sobre la arcilla parisina, fue Qinwen la que, a sus 21 años y emocionada, se dejó caer sobre la arcilla.
1.148 días sin perder
No era para menos. Para poner más contexto, Swiatek había ganado sus últimos 20 partidos sobre tierra batida y tenía un récord de victorias y derrotas de 38-2 en París, donde llevaba sin perder 1.149 días. Su registro de sets, para hilar más fino, estaba en 47 ganados y 4 perdidos, con diez roscos a su favor. Todo ello, terrorífico, no amedrentó a una Zheng que se presentó al mundo en 2022, precisamente, contra la polaca. Entonces, siendo una completa desconocida para el gran público, aún adolescente, fue la única jugadora capaz de robarle un set a la número uno del mundo en su carrera hacia el Grand Slam. Ahora, la victoria le vale una final olímpica. Será el próximo sábado contra la ganadora del Anna Karolina Schmiedlova-Donna Vekic. Entonces, Zheng y Pere Riba sabrán si son de oro o plata.