Los Hispanos, ante Alemania y el avispero del grupo A

Los Hispanos intentarán aprovechar este viernes (16:00 horas) contra Alemania su primer match-ball para estar en los cuartos de final del torneo olímpico, que se trasladarán al imponente Pierre Mauroy de Lille. El partido se incluye en una penúltima jornada eléctrica en un grupo A que se ha convertido en un avispero. España es tercera de grupo con cuatro puntos, los mismos que su rival, Eslovenia y Croacia. Suecia, quinta, tiene dos puntos, pero ganó su partido a Los Hispanos y eso podría complicarle la vida a los de Jordi Ribera en la última jornada (domingo, 21:00 horas, frente a Croacia).

Alemania, que había empezado con dos victorias y pinchó este miércoles contra Croacia, lleva sin tocar metal olímpico desde 2004. Su último gran triunfo fue en el Europeo desde 2016. Dirigida por el islandés Alfred Gislason es, sin embargo, un equipo de un potencial tremendo. Epicentro del balonmano, y salvo Andreas Wolff, que juega en el Kielce, sus mejores jugadores se reparten por los grandes monstruos de la Bundesliga. Johannes Golla juega en el Flemsburg, Rune Dahmke, en el Kiel; Lukas Mertens, en el Magderburgo. Hay representación del Rhein-Neckar Löwen, Stuttgart (donde también juega Dani Fernández), Göppingen… Una demostración de músculo y de dónde está el negocio.

Jordi Ribera anunció progresos en su equipo, mucho más joven que el de Tokio, durante el torneo. Este partido será un termómetro mejor después del partido de Japón, que propone cosas más alejadas de la ortodoxia europea. La mejor noticia para el seleccionador fue cómo, ante los nipones, hubo apariciones necesarias. Kualdi Odriozola o Tarrafeta dieron un paso hacia delante. Será un partido para demostrar personalidad. Y con cierto morbo. Si no se adelanta su marcha, Gonzalo Pérez de Vargas jugará en el Kiel a partir de 2025. Contra Japón, el meta del Barça no tuvo su mejor día. Pero ya es conocido hace tiempo que hace magia cuando más se le necesita.