PARÍS 2024 | NATACIÓN ARTÍSTICA
Iris y Alisa, la Sagrada Familia
Tras el bronce en equipo, el dúo español aspira “a lo más alto” en sus segundos Juegos, a los que se presenta con un ejercicio libre rompedor y con “la esencia del país”. “Hemos mejorado mucho”, avisa Tió.
Era claramente una apuesta a medio-largo plazo la que hicieron Mayuko Fujiki, seleccionadora española, y el resto del staff técnico cuando decidieron dar la alternativa a dos jóvenes de 18 y 20 años en un dúo olímpico. La pandemia había atrasado 12 meses los Juegos de Tokio 2020 y lo inteligente era sembrar y hacer barbecho para recoger. Como ya se demostró con el bronce por equipos, la primera medalla olímpica para España en 12 años, estaban en lo cierto. Hoy Iris Tió y Alisa Ozhogina, tres años más experimentadas, coordinadas y maduras, afrontarán su segunda cita olímpica como dúo, en las rutinas técnica (este viernes, a las 19:30) y libre (sábado) con las que no se marcan un límite. “Vamos a competir y a disfrutar”, avisan.
“Alisa y yo hemos mejorado mucho. Poder competir en Tokio nos dio mucha experiencia, pudimos darnos cuenta, saber y asimilar lo que son unos Juegos. Ambas somos más maduras, nuestro camino es más largo”, expone ya de entrada Tió, la mitad de esa pareja que tras la décima plaza en Tokio lleva dos bronces mundiales consecutivos, ambos en rutina técnica, en Fukuoka 2023 y Doha 2024. Los primeros que conseguía un dúo español desde Ona Carbonell y Marga Crespí en Barcelona 2013. “Nos ha ayudado la experiencia de entrenar juntas, porque a Tokio fuimos solo unos meses después de habernos conocido”, añade Ozhoghina, aún con el subidón de la medalla del miércoles.
A un año antes, hasta Londres 2012, hay que remontarse para encontrar igual que pasaba con los equipos la última medalla olímpica en la especialidad, la plata de Carbonell junto a Andrea Fuentes, el mismo metal que se habían colgado la propia Fuentes y Gemma Mengual en Pekín 2008. “¿Si el listón está alto? Es inevitable. Nosotras tenemos que estar pendientes de lo que está en nuestras manos, aunque si entrenamos es para mejorar respecto a los últimos Mundiales y llegar a lo más alto”, sentencia Tió, en conversación con AS.
En el Centro Acuático de París irrumpirán las españolas con el ‘Beat it’ de Michael Jackson que ya les garantizó esos podios mundiales en rutina técnica, y con una icónica novedad reservada para el dúo libre. Un estreno en toda regla ideado exclusivamente para estos Juegos, con un montaje musical y de voces inspirado en la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona.
“Es un nuevo ejercicio que esperamos que guste mucho. Queríamos llevar algo de nuestro país, la esencia, que fuera muy artístico, porque queremos seguir despuntando en este apartado”, avanza la catalana, quien rubrica: “No vamos a dejar de hacer la impresión artística, porque es nuestro punto fuerte, y después la dificultad, la ejecución… Debemos estar pendientes de todo, porque hay muy buen nivel”.
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