Conde: “Los protagonistas son los aficionados porque son los que hacen grande al baloncesto”

-Han pasado unos días de ese momento que puede considerarse como único en su carrera. ¿Qué recuerda de ese pasaje?

-Es un evento que aún se tiene que ir digiriendo de alguna manera, pero con la perspectiva de la distancia en el tiempo ya los saboreas. Te queda el recuerdo de estar en un espectáculo de baloncesto de primer nivel en el que tienes un papel importante como es decidir entre lo legal y lo ilegal. Hay que trabajar intenso para que los protagonistas sean los que tienen que ser, salvo que haya algo que salga de lo común. Recuerdo la satisfacción del trabajo bien hecho al final o el abrazo que me di con mis compañeros al llegar al vestuario a la conclusión de la final. Fue una alegría inmensa de haber estado en un hito en mi carrera y que salí airoso en uno de los momentos más importantes de mi carrera. Tuve que hacer un trabajo importante en mi carrera para poder llegar ahí, pero esto no para y ya tengo que pensar en el futuro, porque la nueva temporada está aquí ya.

-¿Le ha dado tiempo a descansar? El calendario para los árbitros internacionales es muy intenso.

-El árbitro internacional tiene eso. Cuando es tiempo de recuperación o reinvención, se nos presentan los torneos internacionales, que son competiciones muy duras. En mi caso, antes de los Juegos tuve que a los Preolímpicos. Y en otros veranos te encuentras mundiales o algún Eurobasket, pero sí da tiempo para poder descansar. Yo ya tengo la mente puesta en el arranque de la siguiente temporada. Por ejemplo, el 4 y 5 de septiembre los árbitros de ACB tenemos un clínic en Tarragona con motivo del arranque de la temporada.

-Y con el añadido de que cada año se modifican normas.

-Siempre que había año olímpico se hacían adaptaciones de reglas. Ahora, desde que están las interpretaciones oficiales, que son un anexo al reglamento, hay pequeñas modificaciones cada año y es distinto. Este año hay detalles muy pequeños. Por lo tanto, siempre tenemos que estar en continua adaptación. En parte, es como el juego, que siempre va con una rápida evolución que hacen equipos, jugadores y entrenadores. El reglamento está para corregir algunas disfunciones.

-Hablando de los jugadores. ¿Cómo son en el trato los jugadores de NBA en comparación con los FIBA?

-El baloncesto internacional ha cambiado, porque muchos jugadores del baloncesto internacional de fuera de Estados Unidos que también juegan en esa Liga y tienen esa mentalidad. Hay jugadores de mucha clase en todas las selecciones. Pongo el ejemplo en Sudán del Sur, que parecen desconocidos y tienen jugadores de muchísima calidad. Los americanos tienen un comportamiento similar, pero no están acostumbrados a algunas reglas, aunque son muy parecidas como defensas o sistemas de juego. Pero sí han demostrado que se han adaptado muy rápido. Cuando no entienden algo, preguntan, hablan y analizan porque quieren entender la razón de algunas decisiones que se toman. Pero son similares.

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-¿Pero tienen algo especial los que se podrían considerar como estrellas?

-Los americanos son bastantes cercanos, pero no sólo ellos. También puede suceder con europeos como Wembanyama o Schröder, que son grandes estrellas. Quieren abrir comunicación con los árbitros para recibir información en determinados momentos. Son muy profesionales en el trato.

-20 años como internacional. ¿Ha cambiado más el árbitro o el juego?

-Pues creo que sólo hay que coger una cinta de vídeo de la época y ponerse un partido de los de entonces y los de ahora. Todo va cambiando, porque todo cambia en función al juego. El trabajo en equipo de la formación arbitral es, probablemente, lo que más ha cambiado y eso se acentúa en las grandes competiciones. El equipo arbitral tiene que estar por encima de lo individual o de un árbitro aislado.

-¿La tecnología ayuda o no?

-El instant replay es una herramienta muy útil. No va a eliminar los problemas, pero los va a minimizar. Siembre queda un margen de decisión del árbitro, que puede adaptarse o no a lo que piensen los participantes. Hay decisiones que se deben tomar en décimas de segundo. El baloncesto es un espectáculo que tiene mucho de dinamismo, emoción y excitación. Si se detiene mucho el juego, también se puede aburrir el espectador, que al final es el gran protagonista del espectáculo y que hace tan grandioso a este juego. Hoy en día enganchar a las personas para seguir un partido entero de un deporte es muy complicado.

-25 años en ACB y 20 como árbitro internacional. ¿Se cansa de tanto baloncesto a la semana?

-Es muy exigente y te demanda mucho tiempo, pero después te da muchas satisfacciones. Es tu trabajo y lo tomas como tal, pero compensa. Es algo que lo llevas dentro desde pequeño y tienes la inmensa fortuna de poder trabajar en lo que te gusta. Es duro, porque estás solo y son muchas horas de viaje. Además, se presentan momentos bajos, como en cualquier trabajo. Pero te enseña a tomar decisiones y a superar retos de manera autónoma. Pero en el momento que te relajes será cuando empieces a bajar. Siempre hay que superarse planteándose nuevos desafíos para pulirme e incorporando nuevos aspectos que me permitan mejorar.

-Grandes competiciones, finales. ¿Qué le queda a su carrera?

-Me quedan ir mejorando en algunas facetas de mi desempeño en la pista, tanto dentro como fuera. Ahora no sólo trabajo para mí, sino también para los nuevos miembros del equipo arbitral. Es el momento de compartir lo que llevo en mi mochila arbitral para los que se incorporan. Al final, si el grupo mejora, tú también.

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-Una pregunta utópica. ¿Preferiría pitar un partido de la NBA o la final de la Euroliga?

-Los dos eventos serían muy bonitos. Depende eso con el gusto de cada uno. Yo estoy muy contento con lo que he hecho.

-Volvamos a la final de París: ¿Algún mensaje que le llegara especialmente por parte de compañeros que ha tenido en el camino?

-Todavía tengo mensajes sin contestar, pero lo haré seguro. Son muchos compañeros. Recuerdo a Fermín González, un asturiano con quien subí a ACB, y como él, Arteaga, Ramos Hierrezuelo, Miguelo Betancor, Martín Bertrán… Ellos han conseguido evolucionar el arbitraje en España y también me han ayudado. He dado una lista muy importante, pero habría más. Gallo, Monjas, Mitjana… Con ellos he compartido llantos y alegrías. Pido perdón porque me los voy a dejar. Con ellos compartía la ilusión de cada partido por muchos que llevaran dirigidos y eso lo he llevado en mi mochila a todas partes.

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