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PARÍS 2024 | BÁDMINTON

Carolina Marín, operada con éxito

La española es intervenida del ligamento cruzado y los meniscos de la rodilla derecha sin complicaciones. “Está de buen humor”, dice su equipo.

París
Carolina Marín, operada con éxito
JESUS ALVAREZ ORIHUELADIARIO AS

Tal y como estaba previsto, este miércoles, Carolina Marín fue operada de la rotura del ligamento cruzado y los meniscos interno y externo de su rodilla izquierda que sufrió durante las semifinales de los Juegos Olímpicos de París. La intervención, en la Clínica Olympia y realizada por el Dr. Leyes, se desarrolló sin complicaciones. “Todo ha ido todo bien. La cirugía ha consistido en hacer un nuevo ligamento y coser ambos meniscos. Además, le hemos hecho un refuerzo extra articular para tener una mayor estabilidad rotacional de la rodilla”, explicó el propio médico encargado de la operación.

“Ha habido que reconstruirle el ligamento cruzado de su tendón rotuliano y ha habido que coser los dos meniscos. Eso es lo que va a marcar los tiempos de recuperación y de rehabilitación. Ya se encuentra en la habitación, disfrutando de sus familiares, y con buen humor”, añadió, por su parte, el fisioterapeuta habitual de Carolina, Carlos de Santos, el encargado de conducir su vuelta a las pistas en las anteriores dos lesiones. El Dr. Leyes, por su parte, ya fue quien operó a Carolina de la lesión de 2021 (de ligamento y meniscos igualmente, pero en la izquierda).

De esta forma, como la propia Carolina expresaba en una carta publicada este martes, la española, cuando así lo estime junto a su equipo, emprenderá “un camino que ya conoce”, la tercera recuperación tras una lesión grave de rodilla. La primera, en 2019, fue en la misma pierna derecha de ahora. Entonces, con sólo el ligamento afectado, estuvo parada siete meses, con la pandemia como complicación para su proceso de recuperación. Luego, lo que aumenta la magnitud del drama, a solo dos meses de los Juegos de Tokio, hizo crack la otra rodilla. Para volver de este segundo percance, que retrasó un quiste parameniscal, necesitó casi un año (337 días).

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