La mala suerte de Thomas Van der Plaetsen
El belga cayó de bruces contra el foso en salto de longitud y tuvo que abandonar. En 2014 se enfrentó y superó un cáncer de testículos.
El decatleta belga Thomas Van der Plaetsen ha sido protagonista en el inicio de la jornada en los Juegos Olímpicos de Tokio tras la dura caída que ha sufrido en la prueba de salto de longitud, la segunda prueba del decatlón, tras arrastrar molestias físicas tras los 100 metros lisos.
En su primer intento en longitud Van der Plaetsen quedó bloqueado tras pisar la plastilina con tal mala fortuna que cayó de bruces contra el foso de arena. El decatleta tuvo que ser sacado en silla de ruedas del estadio y se vio obligado a abandonar la competición tras estas molestias.
Una desgracia más en la ya de por sí tortuosa carrera y vida de Van der Plaetsen, todo un ejemplo de superación. En 2014 tuvo que hacer frente a un cáncer de testículos después de ser acusado de dopaje y después de perder a su padre en 2011 por culpa de otro cáncer. Pese a ello, el belga es todo un ejemplo de superación, ya que derrotó a la enfermedad tras pasar la quimioterapia y ser octavo en los Juegos de Río. Ahora Van der Plaetsen, que acumula en su palmarés un título de campeón de Europa y un bronce mundialista en pista cubierta, ya mira a los Juegos de París 2024 en busca de más fortuna en los Juegos Olímpicos.