JUEGOS OLÍMPICOS | ATLETISMO

Duplantis es campeón olímpico: un oro a las puertas del cielo

Armand Duplantis, de 21 años, ganó la final de pértiga con 6,02 e hizo tres intentos de récord del mundo, que estuvieron cerquísima.

TOPSHOT - Sweden's Armand Duplantis competes in the men's pole vault final during the Tokyo 2020 Olympic Games at the Olympic Stadium in Tokyo on August 3, 2021. (Photo by Andrej ISAKOVIC / AFP)
ANDREJ ISAKOVIC
Juanma Bellón
Juanma Bellón. Nació en 1983, en Úbeda. Corrió 800 metros en 1:49. Estudió periodismo en la Complutense y en 2006 entró en AS, a Más Deporte. Escribió de temas polideportivos, mucho atletismo. Cubrió los Juegos de Tokio. Ahora es jefe de la sección de Actualidad. Allí se trata de economía, ciencia, conflictos internacionales, política y lo que sea.
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El primero estuvo cerquísima, en el segundo falló del todo… A Armand Duplantis se le inyectaba la ansiedad en los ojos con el listón de pértiga a 6,19. A una altura que da miedo. Era un intento de batir su propio récord mundial. El oro olímpico lo había ganado casi media hora atrás, cuando saltó 6,02 a la primera y dejó con la plata a Chris Nielsen (5,97) y el bronce al renacido brasileño Thiago Braz (5,87), defensor del título olímpico. Mondo vive en otro planeta.

El tercer intento de Duplantis fue el que centró la atención de todo el mundo. Del planeta atletismo que buscaba rey. Había hablado con Greg, su padre, expertiguista y su entrenador. Su todo. También con Lavillenie, explusmarquista y octavo de la final. El francés miraba con atención a Mondo, de 21 años. Un atleta único, que creció en el cajetín de su casa de Luisiana. Pero el tercer intento tampoco fue… El récord del mundo de Duplantis tendrá que esperar. La gloria olímpica ya la tiene.

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Cogió Duplantis su bandera de Suecia, el país de su madre Helena y celebró. Él nació en Louisiana, pero compite bajo los colores escandinavos. Y allí, en la curva de los 200 metros y donde la colchoneta de pértiga, había una maraña de camisetas amarillas. En el país hay locura con Mondo, que les responde pasando allí largas temporadas y con una fiesta olímpica de oro. Sólo faltó el récord...

"Los Juegos Olímpicos era el momento que esperaba toda mi vida, desde que llevo desde los 6 años entrenándome en el jardín de casa. Así que sólo puedo ser feliz con esta medalla de oro", decía el sueco-americano Duplantis, que se quedó a las puertas del cielo.

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