Reyes Pla, privado del bronce: "Los jueces me lo han quitado"
El boxeador español pierde por decisión dividida, con polémica, frente a su excompañero cubano Julio La Cruz. Lozano: "Se han guiado por los títulos"
El boxeo lleva decenas de años regalando oportunidades. Cambiando vidas a base de golpes. También hundiéndolas. Deporte de extremos, ofrece revanchas frente a la vida. Como la que buscaba Enmanuel Reyes Pla, español nacido en La Habana que salió de Cuba en busca de otro horizonte vital y deportivo, recaló en A Coruña y estuvo a punto de asegurar un bronce para España en el peso pesado (-91 kg). Pero una decisión injusta de los jueces le privó de estar en semifinales, donde se hubiese asegurado medalla. Un combate, además, con connotaciones políticas.
En el Arena Kokugikan pesó el palmarés del cubano Julio César La Cruz, su excompatriota y excompañero, al que los jueces dieron ganador por decisión dividida (29-28, 29-28, 30-27, 28-29 y 29-28). La 'Sombra de Camagüey' fue campeón olímpico en el semipesado en Río y cuatro veces campeón mundial. Su aura y el peso de Cuba en el boxeo viraron el veredicto. El primer asalto fue del cubano, el segundo lo ganó claramente el español y en el tercero, más parejo, fue también Reyes Pla quien llevó la iniciativa y conectó más golpes.
"Me siento ganador, a lo mejor influyó su palmarés. Por culpa de los jueces no me llevo la medalla", se quejó el gigante hispanocubano, que obtuvo la nacionalidad en enero pasado tras pasar una odisea de fuga por Europa que incluyó cuatro meses encerrado en un piso en Moscú y reclusiones en centros de refugiados.
'El Profeta', que venía de noquear al subcampeón olímpico Vassiliy Levit con la rabia de los que han dejado atrás el infierno, demostró su hambre en el templo del sumo, donde el dohyo se ha transformado en ring. La Cruz salió con su guardia baja y Reyes Pla la asaltó. en el segundo round, le tiró dos veces al suelo, pero el juez chino Guo Zhang tampoco activó la cuenta de protección. En el tercero hubo continuos intercambios de cuero, pero pareció llegar más el español.
"Le han quitado la medalla. Es injusto y no es normal que siempre se repita esto", protestaba Rafa Lozano, el seleccionador, aludiendo a los escándalos que han lastrado al boxeo amateur hasta el punto de que el Comité Olímpico Internacional retirara a AIBA (la Federación) la organización en Tokio tras decisiones inexplicables en Río. "Se han guiado por los títulos y no por los golpes", seguía Balita. ¡Nos vemos en París!", cerraba optimista, pero dolido, El Profeta. El día de su revancha no era este.