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JUEGOS OLÍMPICOS

El final feliz para la chilena que dio positivo antes de Tokio

La taekwondista Fernanda Aguirre vivió una pesadilla antes de los Juegos: viajó a Japón, pero no pudo compertir. Estuvo aislada durante diez días antes de volver.

Tokio
El final feliz para la chilena que dio positivo antes de Tokio

Fernanda Aguirre dio la vuelta al mundo, pero no por las razones que le hubiese gustado. La chilena fue uno de los primeros casos positivos confirmados por coronavirus antes del inicio de los Juegos Olímpicos.

Un golpe demasiado duro para la joven de 24 años, que viajó a Japón para hacer su estreno en este evento, y tuvo que vivir un calvario. El sueño se acabó en el aeropuerto. También la ilusión de vivir en la VIlla Olímpica. Fue trasladada a una residencia sanitaria en Tokio, donde estuvo aislada diez días.

Ahí pasó de todo. "Creo que es un falso positivo", lamentó en sus primeros días de encierro, donde intentó revertir su caso sin suerte. Luego vino la pena y la frustración: "Me da mucha rabia y siento que es injusto que me hayan arrebatado así un sueño por el que tanto luché".

Finalmente tuvo que asumir que sus primeros Juegos no serían como ella había soñado tantas veces, sin embargo, antes de regresar a Santiago, tuvo la oportunidad de llevarse un pequeño recuerdo más feliz de Tokio.

Este miércoles terminó el encierro de la nacional, que pudo conocer finalmente la VIlla Olímpica. Ahí la esperaban los integrantes del Team Chile. incluso la selección femenina, que pasó por Tokio tras su actuación en Miyagi.

"Conversamos con ella y estaba súper afectada. Le dimos todo nuestro apoyo, para que todo lo que sufrió lo transforme en motivación", dice Marco Grimalt. "Ella sintió que creció mucho durante esos días de cuarentena. Lloró todo lo que tenía que llorar. Aprender y levantarse más fuerte", agregó.

Un lindo recuerdo para Aguirre, que con 24 años tendrá tiempo para buscar una revancha: primero en los Juegos Panamericanos 2023 y luego en los Juegos Olímpicos de París 2024. Tokio no fue lo que ella esperaba, sin embargo, tampoco terminó tan mal.