Rodrigo Corrales y Gonzalo Pérez De Vargas echan el toldo
Los Hispanos se miden este miércoles a Brasil (12:30 horas) después de dos victorias que se han cimentado desde atrás. El del Veszprem tuvo un 41% de acierto ante Noruega.
Las vidas de Pérez de Vargas (1991) y Corrales (30) se conectaron antes incluso de que ellos lo supieran. En las Granollers Cup de 2003, Gonzalo ganó el campeonato con el Aníbal Toledo y Rodrigo fue tercero con su Cangas. Al año que viene, Corrales se tomó la revancha. Luego, el Barça los acercó mucho más. Estuvieron en la Blume y hasta llegaron a compartir piso. Aprendieron catalán, se hicieron mayores allí y sólo el balonmano, que les había unido, les separó. Con Pérez de Vargas asentado en la portería, Corrales decidió dar un salto en su carrera y, a la vuelta de su cesión en el Wisla Plock, fichar por el Paris Saint Germain. Ahora juega en el Veszprem. mientras Pérez de Vargas, que un día fantaseó con su compañero de piso en compartir portería en el Palau, es multicampeón de todo con el equipo que ha pasado a manos del malagueño Antonio Carlos Ortega.
De momento, Jordi Ribera ha rotado a sus porteros en los Juegos. Pérez de Vargas tuvo un 29% de acierto en la victoria contra Alemania. Corrales jugó un partido memorable ante los noruegos, a los que detuvo 16 de 39 tiros, un espectacular 41%, con un catálogo de intervenciones de locos. Dicen los expertos que De Vargas es la sobriedad; y Corrales, el talento puro.
Con el toldo echado, España se cruza hoy con Brasil en el Yoyogi (12:30 horas), que ha caído en sus dos primeros partidos ante Noruega y Francia, pero que no estuvo lejos de ninguna de las dos (-3 y -5, respectivamente). No es un momento para que los Hispanos se relajen. Pendiente aún del enfrentamiento contra Francia, una de las dos primeras plazas del grupo está encarrilada, y eso podría permitir evitar a Suecia y Dinamarca, cocos del otro grupo. Que Corrales y De Vargas sigan echando el toldo, Dujshebaev haciendo su magia y todo el grupo, un trabajo de momento impecable.