Clavadistas mexicanos en la historia de los Juegos Olímpicos

Fue en los Juegos Olímpicos de Amsterdam en 1928 cuando México inició su camino en los clavados, solamente un atleta participó, fue Federico Mariscal Abascal, quien no pudo acceder a la final.

La vida le tendría una revancha, 4 años después en Los Ángeles 1932, Federico volvió a asistir, y muy bien acompañado, junto sus hermanos Antonio y Alonso, finalizaron en los lugares 10, 12 y 13 respectivamente, los 3 en trampolín, mientras que en la plataforma, Carlos Curiel y Jesús Flores Alba fueron quinto y sexto.

Para Berlín 1936, solo un representante nacional, Flores Alba, quien terminó en el antepenúltimo lugar.

Ellos fueron abriendo el camino, pero quien lo pavimentó fue el histórico Joaquín Capilla Pérez, quien tendría su debut a los 20 años en Londres 1948 y ganaría su primera medalla, sería de bronce, la primera para México en olímpicos. Esta edición no solo fue histórica por la presea ganada, también lo fue por que Ivonne Belausteguigoitia Arocena y Rosa Gutiérrez de Pardo, fueron las primeras mujeres clavadistas en competir.

Ahora vamos a Helsinki 1952, con Joaquín Capilla al frente de la delegación mexicana como abanderado, su actuación terminaría por ser más destacada que 4 años antes, ganó plata desde la plataforma. Su hermano mayor Alberto, también compitió.

Melbourne 1956, el doble medallista olímpico se convierte nuevamente en el portador de nuestra bandera nacional, la expectativa era muy grande, en sus primeros juegos ganó bronce, en los segundos plata, y si la lógica imperaba, ahora tendría que ser de oro, y así fue, ganó la presea áurea desde los 10 metros y además bronce desde el trampolín, simplemente un fuera de serie. Fueron sus terceros Juegos Olímpicos y últimos para el aún máximo ganador de medallas olímpicas de México.

Ese año en Australia, México no tuvo participación femenina.

Roma 1960, la sombra de Capilla ya pesaba sobre los clavadistas nacionales, Juan Botella Medina terminaría en el tercer lugar en su segunda participación olímpica. María Teresa Adames regresaría a la competencia femenil.

Posteriormente vinieron años de sequía, Tokio 1964, Munich 1972, Montreal 1976, hasta que llegó Moscú 1980, con el abanderado Carlos Girón, quien regresó a México al podio con una plata desde los 3 mts.

Los Ángeles 1984 no le permitiría a nuestros representantes subirse al podio, se tuvo que esperar hasta Seúl 1988, el ex titular de la CONADE, Jesús Mena Campos, se lanzó desde la plataforma para aterrizar en el tercer sitio. Eso lo llevó a ser abanderado en Barcelona 1992, edición en la cuál no hubo medallas, al igual que en Atlanta 1996.

Sydney 2000, Fernando Platas escribió su nombre en la historia olímpica al ser el encargado de portar la bandera tricolor y por ganar un metal plateado. El ahora candidato a dirigir la Federación Mexicana de Natación participó en 4 Juegos Olímpicos, siendo abanderado tanto en Australia como en Atenas 2004.

Beijing 2008 fue el evento en donde iniciaría la consagración de Paola Espinosa, quien, junto a Tatiana Ortiz, ganaría bronce en los 10m sincronizados. Nuevamente quien portó el lábaro patrio, ganó medalla.

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Londres 2012 ha sido hasta la fecha la edición más exitosa para los clavados aztecas. Plata para Germán Sánchez e Iván García en plataforma 10m sincronizados, al igual que Paola Espinosa y Alejandra Orozco. Mientras que Laura Sánchez se consagraba como la primera y única mujer clavadista en obtener una medalla de forma individual al quedarse con el tercer lugar desde el trampolín.

En los últimos Juegos Olímpicos, Río 2016, nuestro país obtuvo un total de 5 medallas en todos los deportes, una de ellas gracias a Germán Sánchez, quedándose con plata desde la plataforma de 10m, prueba en la que no se ganaba desde 1988.

Tokio 2020 será la primera ocasión en que México compita en todas las pruebas con 12 plazas en total.