Paola Espinosa se queda sin Juegos Olímpicos por conflicto con Ana Guevara
La histórica clavadista rompe el silencio y detalla las razones por las que se decidió no otorgarle la plaza que ya había ganado junto a Melany Hernández.
Un conflicto con Ana Gabriela Guevara, titular de la Comisión Nacional del Deporte, es el motivo por el que Paola Espinosa no podrá disputar en Tokio sus quintos Juegos Olímpicos. La molestia de la dirigente nació primero porque la clavadista acudió al Comité Olímpico Mexicano para pedir que le otorgaran la plaza que ya había ganado y después porque se negó a pedir públicamente que el gobierno federal no quitara el fideicomiso que se encuentra bajo investigación por supuestos desvíos millonarios.
Este martes, la histórica clavadista rompió el silencio para ofrecer su versión de lo sucedido. “Yo me gané ese lugar para ir a los Juegos Olímpicos de Tokio en la prueba de tres metros sincronizados, una prueba histórica para el país porque desde Atenas 2004 no se daba para México. Melany Hernández y yo la ganamos en un Campeonato del Mundo con un tercer lugar. Hicimos la parte más difícil para asistir a Juegos Olímpicos, competimos con 24 países, le ganamos a 16 para estar ahí dentro. Fue una plaza olímpica que nos costó mucho trabajo y lo que quiero recalcar es que en todos los ciclos olímpicos pasados quien se ganaba su lugar con medalla, tenía su pase directo a Juegos Olímpicos. Eso ha existido siempre no es una cosa de hoy”, explicó en una videoconferencia.
“Estábamos felices, viene la pandemia que a todos nos afectó muchísimo, yo enfermé de Covid en diciembre, me dio neumonía. Tardé mucho en mejorar, no podía hacer ejercicio en mucho tiempo y cuando me autorizaron entrenar no paré ni un día, me costó volver, pero lo logré y cada vez me sentí mejor. Estaba muy hinchada, pero en realidad fue el tema del Covid. Ya me siento mucho mejor, tengo mucho tiempo que me deshinché por completo y estaba lista para ir a los próximos Juegos Olímpicos. El problema fue que nunca hubo un criterio para clasificar de parte de la Federación Mexicana de Natación, no sabíamos qué día se iba a hacer o si se iba a hacer el selectivo”, agregó.
Revela que Ana Guevara le había prometido la plaza. “Melany y yo hablamos, dijimos que merecíamos esa plaza porque nosotras la habíamos ganado y así la pedimos siempre. La pedimos también a la directora de la Conade y a la FMN, nos decían que sí, que esa plaza iba a ser de nosotros. Con el paso del tiempo volvimos a preguntar y la directora de la Conade nos dijo que no era tema de ella, que el Comité Olímpico Mexicano no quería darnos la plaza. Fui con ellos y les pregunte cuál era el problema, por qué no querían darnos la plaza y dijeron que no era tema de ellos, que era tema de la FMN. En este proceso, hablando con Luz María Chávez que es colaboradora de la directora de Conade, me dijo ‘sabes qué, cometiste un error al ir al Comité Olímpico. Eso no le gustó a la directora de la Conade, es un error tuyo’. Yo no le había tomado importancia porque sólo fui a donde ellos me dijeron que no me querían dar la plaza olímpica. Así sucedieron las cosas y esa fue la primera molestia que tuvo la directora de la Conade, que fuera al Comité Olímpico a pregunta por qué no me daban la plaza”, aseveró.
Luego el conflicto fue en aumento. “Después nos enceraron en una burbuja en el Cenar (Centro Nacional de Alto Rendimiento) en donde la Conade dijo quien no se meta en la burbuja desde ahorita hasta Juegos Olímpicos no será considerado para ir, tienen que estar aquí en la burbuja. Con este tipo de amenaza porque nos los dijeron fuerte y grosero… yo tengo una hija de tres años, mi caso no es como los demás, no la puedo dejar sola. Mandé una carta para decir que no estaba de acuerdo porque no podía dejar a mi hija, pero claro que quiero ir, me gané mi lugar y quiero ir. No vi respuesta, me uní a la burbuja el tiempo que ellos quisieron, como ellos decidieron”, detalló la clavadista.
“Le pregunté directo a la directora de Conade si era algo personal hacerme estar encerrada en el Cenar porque sabía que soy mamá y mi caso no era igual. Me dijo que no era personal que sólo era cuidarnos del Covid. Le dije Ana hace un año me dijiste que esa plaza era mía, quiero saber por qué no se ha hecho oficial. Ella siempre dijo que era mía, pero que era decisión de la Federación que tiene que avalar la plaza. Pasó el tiempo, fuimos a la copa del mundo, regresamos. Ahí ya notaba una molestia más fuerte de Conade hacia mí, no entendía por qué, pero sabía que había una molestia”, siguió Paola Espinosa.
Después, comprendió el verdadero problema. “Empecé a analizarlo y ya sé por qué. Luis María Chávez que es colaboradora de ella me habló por teléfono hace un año para que pusiera en mis redes una carta donde decía que no quería que desapareciera el fideicomiso de la Conade. No me nació hacerlo porque el presidente no dijo que nos dejaría sin apoyo, más bien era una reestructura y así fue, nunca nos dejaron sin apoyo. Yo no me quería prestar, no quería meter las manos al fuego por la investigación que les hacían por falta de transparencia a este fideicomiso por parte de la directora de Conade”, aseveró.
“No quería meter las manos al fuego por un problema que no es mío, porque no me consta si hubo desvío, no sé si es verdad o mentira, pero yo no podía subir esa carta a mis redes sociales porque no podía apoyar ese tema. Es algo que se debe resolver para que ese desvío de recursos a los atletas se aclare y sepamos dónde está todo el dinero perdido. Exhorto a las autoridades para que se aclare, pero es algo que no me consta y no podía ayudar. Creo que ese fue el principal enojo, que no apoyé algo que no me pareció. Seguimos con ese tema, seguimos adelante, nos siguieron diciendo que era para nosotros la plaza, pero que no sabían cómo”, afirmó.
Y lamentó que una sola persona la dejara sin el sueño de competir por una medalla más para México. “Cuando uno trabaja tanto, cuando se esfuerza, cuando se toma las cosas en serio como es mi caso... Después de haber sido mamá, yo regresé a competir internacional en unos Juegos Centroamericanos antes de un año de haber sido mamá. Eso habla de que estaba muy comprometida con este sueño, estaba comprometida a ir a mis quintos Juegos Olímpicos. Trabajé incansablemente, dejé la prueba de tres metros individual para dedicarme a tres metros sincronizado porque sabía que podía ganar una medalla y porque no quería distraerme más de este tiempo... Que de la noche a la mañana te digan que no y más no por tu talento, no por tu esfuerzo, no por tu trabajo, sino que al final hayan pesado más otras cosas”, dijo este martes.
“La verdad es que me siento muy en paz porque di lo mejor de mí, porque luché hasta el último clavado. Me siento feliz porque al fin y al cabo esa plaza yo se la di a México. Yo le di a México esa aplaza, Melany Hernández y yo se las dimos. Dejamos una Final olímpica directa para México, dejamos la oportunidad de que tuvieran que evitar con más de 20 parejas del mundo y ahora sólo tienen que pelear con las ocho mejores que van a Juegos Olímpicos. De eso me siento muy bien, siento que heredé algo muy bueno para México, sigo dejando lo mejor para mi país. Estoy muy en paz, muy feliz, pero claro que mi caso no es el único, hay varios clavadistas como Randal, como Iván en clavados sincronizados. Hay muchos que estamos pasando por esto, pero muy bien en lo personal. Ahorita estoy en paz, tranquila, disfrutando muchísimo a mi hija, con la emoción y el orgullo de haber dejado esta plaza olímpica para México”, concluyó Paola Espinosa.