Roberto Leal, en bus a Eindhoven: “Había rondos en las gasolineras”
El presentador de Pasapalabra, hincha blanquirrojo, tardó 36 horas en llegar a la final: “Era reportero y, como al Sevilla, la vida me ha dado la ocasión de hacer otras cosas”.
Roberto Leal era uno de los miles de sevillistas que estuvo en Eindhoven aquel 10 de mayo de 2006. El ahora presentador de Pasapalabra trabajaba para España Directo y llegó a la final de una manera muy poco cómoda: “Contábamos en primera persona lo que iba a vivir un sevillista que no tenía entrada ni tampoco para pagarse un avión. Tomamos un autobús en La Macarena (barrio de Sevilla) y nos pegamos casi 36 horas hasta el Philips Stadion. Solamente paramos una vez en Irún para comer un bocadillo y también para ir al servicio, muy poquitas veces”.
“Fue una paliza pero lo recuerdo como uno de los mejores viajes de mi vida. Sentía como muy especial la energía en un autobús lleno de aficionados que llevaban casi 50 años esperando algo igual, cantando desde que salieron de Sevilla hasta que llegaron, día y noche sin parar. Llevábamos hasta un balón y en las gasolineras, cuando parábamos, hacíamos un rondito”, recuerda para As el periodista de Alcalá de Guadaira.
Leal tuvo mejor suerte que muchos compañeros de viaje y no se quedó en la puerta del estadio: “Tenía acreditación. Me sentaron en un rincón de la tribuna, al lado de un aficionado inglés. Y el tipo me decía en su idioma, lo que yo entendía entonces, que nos iban a dar para el pelo. Pero el Sevilla iba marcando goles y cuando hicimos el 3-0 el hombre desapareció. Se levantó y se fue. Aplastamos al Middlesbrough”.
La vida de Roberto, como la del Sevilla, ha cambiado tanto como para convertirse en uno de los presentadores más de moda en la TV española: “Fue uno de los momentos deportivos más importantes de mi vida. Mira que luego hemos tenido cosas bonitas pero es que ese día nos cambió la vida a todos los sevillistas, porque llegó una época dorada después de muchas décadas de sufrimiento. Eindhoven solamente era el principio de todo lo que estaba por venir. Es curioso, porque yo entonces era reportero y, como el Sevilla, después de aquello me ha cambiado también mucho la vida. La profesión me fue dando la oportunidad de hacer otras cosas y de crecer”.