Oyarzabal denuncia la parálisis de la UEFA: “Les sacan los colores…”

El otro foco en el Reale Arena, aparte de la derrota de la Real Sociedad frente al Anderlecht, estuvo en los incidentes que provocaron los seguidores belgas a la media hora de juego. Unos hechos advertidos por Oyarzabal, que levantó la voz al finalizar el partido. “Al final, la gente se tiene que marchar a casa por cuatro imbéciles que lanzan cosas”, sentenció.

El capitán de la Real Sociedad apuntó directamente a la UEFA en una comparecencia muy dura en la zona mixta del Reale Arena. “Son cosas que no pueden pasar. Al final la gente que viene a su campo se tiene que marchar a su casa porque cuatro imbéciles están lanzando cosas. Sabiendo que iba a ocurrir. La UEFA tiene que dar un paso adelante. Llevábamos quince minutos diciéndoles que tenían que parar y no han hecho nada. Es un mensaje claro a la UEFA. Y encima les sacan los colores”.

El capitán mostró su preocupación por las decenas de aficionados donostiarras que se vieron afectados por el lanzamiento de asientos. El partido, aunque se paró de forma momentánea, se acabó reanudando. “Que la UEFA tome medidas y que las tomen al momento. No nos sirve de nada a nosotros ni a nuestra gente que las tomen después”, denunció. Y luego fue más allá. “Creo que es importante que la Uefa no haya tomado medidas en el momento que creo que había que tomarlas. En el banquillo hemos empezado a ver que la gente de la esquina de la grada familiar empezaba a levantar los brazos y a correr, y hemos visto arriba qu habían roto el cristal y se colaban para lanzar cosas abajo. Creo que todo el mundo era consciente de lo que pasaba, le hemos dicho al delgado de campo que hablase con el de presidencia para parar el partido, pero nadie ha hecho nada”.

Después, ha querido profundizar en su argumento, muy contundente. “El mensaje de hoy es a Uefa, que se den cuenta de que cosas así no pueden pasar, que esto daña la imagen del fútbol hoy la suya, porque pueden ser los máximos culpables de que no se haya parado en el momento”. Y ha dirigido también críticas al colegiado, porque no entendía que tardara tanto en reaccionar. “Creo que no sé si suspender o meterse dentro, pero tenía que haber habido un momento de parón, de que el árbitro tocase el silbato y nos centrásemos en lo que había que centrarse, porque todo el mundo tenía un ojo en lo que pasaba en la grada. La prioridad o el foco no era el fútbol, sino parar lo que estaba pasando en la grada”.

Y para terminar, pedía soluciones de cara al futuro. “Creo que desde el minuto uno, sabiendo quienes venían, se tenían que haber tomado medidas y no esperar a que pasaran cosas. No me sirve de nada que mañana haya sanción y no les dejen entrar a un campo de fútbol, porque los perjudicados hoy han sido mis aficionados. No se puede venir a un partido de fútbol a hacer el gilipollas y, antes de eso, se debería de controlar en Uefa la venta de entradas”.

Cinco detenidos

La Ertzaintza detuvo a cinco personas en los incidentes registrados en la grada visitante del Reale Arena en la zona ocupada por los aficionados del equipo belga. Según informó el departamento vasco de Seguridad, una de las personas fue detenida por atentado a la autoridad, otra por desórdenes públicos y la tercera por daños y resistencia a los agentes. Las otras dos fueron detenidas posteriormente.

Durante la primera mitad del partido, ultras del Arderlecht lograron romper la valla de seguridad instalada en la grada visitante y arrojaron objetos, entre ellos asientos, a la grada inferior, en la que presenciaban el partido aficionados de la Real Sociedad. Muchos socios tuvieron que abandonar esa zona de la grada para evitar ser golpeados

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