La Europa League vuelve a encender y a dar ánimos al sevillismo
En una temporada nefasta y aunque aún queda la vuelta, el sufrido empate en Old Trafford con el Manchester United hace soñar con la séptima a la afición del Sevilla.
EI Sevilla, en la que es probablemente su peor temporada desde que ascendiera a Primera por última vez en 2001, ha vuelto a encender la llama de la ilusión de sus aficionados en este final de temporada. Y no se puede decir que no se sepa cómo lo ha hecho, porque todo lo contrario. La chispa que ha generado el incendio tiene dos palabras que son “Europa League”.
En el minuto 85 del duelo de ida ante el United en Old Trafford, los sevillistas daban gracias por sólo haber encajado dos goles y afilaban las críticas contra el recién llegado Mendilibar y los clásicos Monchi y presidente José Castro. Diez minutos después, con el partido ya acabado, se lamentaba que el añadido no hubiera durado más porque se habría regresado con el triunfo de vuelta a Nervión. La magia de una Europa League que el Sevilla ha ganado las seis veces anteriores que pisó los cuartos de final y que en la noche de Mánchester reafirmó su candidatura.
Mientras eso pasaba en la noche británica, en la sevillana quedaba colapsada la web de compra de entradas para el partido de vuelta. Los socios del Sevilla tienen que pasar por caja. Pagan menos que el público general pero deben activar sus abonos telemáticamente. Y la página web se vino abajo. Por ello, el Sevilla ha ampliado el plazo de activación de los abonos 24 horas más. Los socios podrán asegurarse su asiento hasta última hora de este sábado. Se espera una gran entrada en Nervión y, por supuesto, la llegada en masa de hinchas del United.
Debut. El estreno de Mendilibar en Europa tuvo tintes de drama gran parte de un partido que acabó con el habitual final feliz de comedia romántica del Sevilla protagoniza en su competición. “Si perdemos 4-0 me dais por todos lados y ahora tenéis que callar”, dijo el vasco entre risas en la sala de prensa.
No es para menos, puesto que su once y su planteamiento inicial dejaron mucho que desear. Pero la conclusión es que se volvió a Sevila vivos y contentos. Y con varios jugadores descansados.