Había once...; y había banquillo
Luis de la Fuente ha gastado los cambios en los seis partidos. Jugadores que empezaron como suplentes como Olmo o Merino han resultado decisivos en el campeonato.
Los cambios son la mejor prueba de la confianza de Luis de la Fuente en los 26 jugadores que convocó para la Eurocopa a principio de junio. El entrenador de Haro ha agotado todos los cambios desde que empezó el campeonato. Hasta 31 ha hecho: los cinco correspondientes a cada uno de los seis partidos, más el de Joselu por Fabián en la prórroga de los cuartos final contra Alemania en Stuttgart.
Más allá de la luz que proyectan jugadores como Rodrigo, Lamine o Nico, la fuerza de este equipo, y ya se encargó de resaltarlo Luis de la Fuente en su entrevista con AS, es que “la Selección no es sólo Lamine y Nico. El seleccionador ha tenido la seguridad de poder mandar a los titulares el mensaje de que podían exprimirse porque detrás, y salvo con insustituibles como Rodrigo, hay jugadores de un nivel similar a los que salen de inicio.
Las dos mejores muestras de suplentes de oro son Dani Olmo y Mikel Merino. El primero llegó a Las Rozas corto de preparación. Debía ir recuperando su cien por cien paulatinamente. Él quería jugar el primer partido desde el inicio (“si no me veo yo titular; quién me va a ver”, dijo en la carpa de prensa de la FEF en Donaueschingen), pero De la Fuente optó por Pedri.
El día de Albania ya demostró que estaba cogiendo tono; y contra Alemania jugó un partido para el recuerdo, con un gol y una asistencia. La lesión de Pedri le ha instalado en el once inicial. El otro suplente de oro ha sido Mikel Merino, que más allá de ese gol contra Alemania que ya está en los libros de historia del fútbol español; ofrece una consistencia tremenda al equipo cada vez que aparece en el terreno de juego. Normalmente, con su socio de la Real, Mikel Oyarzabal, que da aire a la delantera cuando Morata ya ha entregado hasta la última gota de sudor.
Todos han cumplido. La última aparición espectacular ha sido la de Vivian. El central del Athletic, que hace apenas tres años jugaba en el Mirandés y que se incorporó a las listas de la Selección en marzo, estuvo sobrio y valiente contra Kolo Muani y Mbappé; y jugó con una entereza brutal cuando le tocó entrar en lugar de Jesús Navas, que hizo su penúltimo servicio, cerca ya de sus 39 años, en la semifinal de este martes en Múnich.
Futbolistas como Ferran han sido capaces de llevarse el MVP el día que De la Fuente le dio la camiseta de titular contra Albania. Hasta los que menos minutos han tenido, como Joselu, Baena, Zubimendi, Grimaldo, Ayoze o Fermín han ayudado en lo que han podido y, sobre todo, han colaborado en el buen ambiente de una concentración larguísima en Donaueschingen que ya es, para siempre, inolvidable.
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