Esperando a Gabri Veiga
La Selección Sub-21 necesita recuperar la mejor versión del jugador del Celta de cara a los cuartos de final del Europeo. Hasta el momento, nada le ha salido bien.
Algo extraño le pasa a Gabri Veiga en el Europeo Sub-21. El del Celta fue el gran reclamo de la selección de Santi Denia cuando el técnico de La Rojita anunció la lista para el torneo de Georgia y Rumanía y, hasta el momento, con la fase de grupos finalizada, el futbolista es una sombra del jugador que ha demostrado ser a lo largo de toda la temporada.
Existen varios factores ajenos que explican por qué Veiga no ha formado parte del equipo titular en la primera fase. El primero es la falta de minutos acumulados con la Sub-21 antes del torneo. España es un equipo cuyo bloque principal está formado desde hace casi dos años. Veiga fue convocado por primera vez en noviembre para un amistoso ante Japón en el el último partido de Luis de la Fuente como técnico de La Rojita. Jugó un minuto y no tuvo más oportunidades de juntarse con sus compañeros de Selección hasta la concentración de marzo, de la que se cayó a última hora por lesión. En Las Rozas sumó otros 45 minutos en el amistoso de preparación ante México. Un total de 46 minutos para adaptarse a un equipo hecho que tiene en su línea de centrocampistas ofensivos y mediapuntas su mayor acumulación de talento con Rodri, Sergio Gómez, Sancet, Baena, Aimar Oroz o Riquelme. Es lógico, por tanto, que Denia prefiriera confiar en los jugadores que metieron a España en el Europeo en el debut ante Rumanía, pero no tanto que un jugador como Gabri haya tenido después tan poco protagonismo.
Lo normal en este tipo de torneos es que los que empiezan jugando no sean los mismos que los que lo terminan. La competitividad en cada entrenamiento es máxima y el mínimo error lo aprovecha un compañero para hacerse con un hueco. No está siendo así en el caso de Gabri. Ante Rumanía sustituyó a Sancet cuando quedaban 15 minutos y fue intrascendente, al igual que ante Croacia, ante la que disputó media hora sin ser determinante. La mala suerte hizo además que sufriera un golpe ante los croatas que le hizo arrastrar molestias hasta la mañana del partido ante Ucrania, en el que iba a ser titular. Gabri le dijo a Denia que no estaba al 100% para jugar y pactó con el técnico y el cuerpo médico jugar solo 20 minutos, en los que tampoco destacó.
Nadie duda de la calidad y las capacidades de Gabri Veiga, uno de los mejores jugadores de la pasada Liga, en la que marcó 11 goles y dio cuatro asistencias. Media Premier anda detrás de él, incluyendo al City, que, según los medios ingleses, ayer se sumó a la puja por el futbolista, que tiene una cláusula de 40 millones. Sin embargo, la imagen que está dejando en el Europeo está muy alejada de su mejor versión y España la necesitará cuanto antes.