Un Ibiza en caída libre

La UD Ibiza ha entrado en caída libre. Los números que presenta el conjunto ibicenco son desalentadores y dejan muy claro que se necesita una reacción cuanto antes. El bloque balear, que sigue una semana más en descenso y podría acabar la jornada en el farolillo rojo, tampoco ha levantado cabeza con la llegada de Juan Antonio Anquela como entrenador. En el seno de la entidad están preocupados y reconocen que la situación es delicada, pero también se muestran convencidos de que la van a sacar adelante. Consideran que, de momento, la única solución es trabajar más para que el equipo adquiera las prestaciones necesarias.

Anquela reemplazó a Javier Baraja en el banquillo, pero los isleños no han puntuado todavía con el nuevo míster. Con el andaluz al frente los celestes han encajado cuatro goles y no han marcado ninguno. Un signo clarísimo de debilidad de la plantilla ibicenca, que se sigue mostrando muy endeble en defensa y sin acierto en ataque. El entrenador de los baleares no se mordió la lengua en rueda de prensa, tras la derrota frente al Leganés por 0-2, y dejó claro que se están mostrando muy blandos y que necesitan ser más competitivos porque la Segunda División es una categoría muy complicada.

En las últimas cinco derrotas sufridas, los celestes han encajado diez goles, casi la mitad de los que les han metido hasta la fecha (22). En esos mismos encuentros los isleños sólo han marcado dos tantos. Se da la circunstancia de que con esos goles se pusieron por delante en el marcador y no supieron administrar su ventaja, jugando además en casa. El Eibar y el Levante acabaron remontando al Ibiza, en ambos duelos por 1-2, en otro ejemplo más de que este Ibiza es un adversario sin empaque.

Ocho puntos menos que la campaña anterior

Por otra parte, se dice que las comparaciones son odiosas, pero las cifras cantan cuando se mira cómo estaba el Ibiza tras la decimocuarta jornada en la temporada pasada. Aquel equipo, que entrenaba Juan Carlos Carcedo, tenía 19 puntos, ocho más que el de ahora. Esa escuadra había ganado cuatro partidos, empatado siete y perdido tres, marcando 17 goles y recibido 18. Estaba décima en la clasificación y cinco puntos por encima del descenso a Primera RFEF. Acabó consiguiendo la permanencia, ya con Paco Jémez como entrenador. El Ibiza actual lleva tres victorias, dos empates y nueve derrotas, con apenas 10 goles marcados y 22 encajados. A falta de que se complete la jornada está, provisionalmente, a dos puntos de salir del descenso. Ya lleva dos entrenadores esta temporada.