Reválida para Garitano en su estreno como local en El Molinón
El Mirandés, que sigue sin ganar fuera de casa en la segunda vuelta, pone a prueba la reacción de un Sporting que quiere reforzar su triunfo en Elda.
El Sporting vuelve a jugar en El Molinón-Quini donde su afición le ha visto perder los dos últimos partidos y no disfruta de un triunfo desde hace dos meses y medio (sigue el partido en directo en As.com). Esa trayectoria acabó con la etapa de Rubén Albés en el banquillo local en el que se estrena Asier Garitano después de su debut triunfal la pasada jornada en Elda. Esa victoria le ha dado un respiro al equipo gijonés, pero deberá refrendarlo esta tarde. El técnico vasco afronta sin duda toda una reválida en este compromiso ante el equipo revelación del campeonato.
Garitano debuta en El Molinón-Quini con el mismo bloque de futbolistas que asaltó con éxito el Nuevo Pepico Amat hace solo cinco días. Se mantienen las cinco bajas (Gaspar, Dotor, Caicedo, Curbelo y Bernal) en este Sporting que aspira a conseguir un triunfo que le permita alejarse todavía más del peligro que acecha.
No habrá muchas novedades en la alineación del Sporting. Solo la entrada de Guille Rosas en el lateral derecho podría ser el único cambio respecto al once rojiblanco en el partido frente al Eldense.
El Mirandés, por su parte, afronta un partido marcado en rojo por varios motivos: seguir instalado en la zona noble de la clasificación, romper la mala racha del equipo lejos de Anduva y coger un impulso positivo para afrontar el tramo final del campeonato.
El conjunto jabato todavía no sabe lo que es ganar a domicilio en la segunda vuelta. Desde su amplio triunfo en Riazor por 0-4 del pasado 22 de diciembre, los pupilos de Alessio Lisci no consiguen los tres puntos lejos de Anduva. Un dato que no se ha convertido en una obsesión para el equipo, como se ha encargado de reiterar el preparador italiano, ya que la ilusión por alcanzar cotas más altas esta temporada se mantiene intacta dentro de la propia plantilla y entre los aficionados rojillos que agotaron en tiempo récord las 600 localidades para presenciar el duelo en El Molinón-Enrique Castro Quini.
Los pequeños detalles se pagan muy caros en la categoría de plata. Algo en lo que ha incidido Lisci durante la última semana. El Mirandés dejó escapar puntos en el tramo final en Elda, Albacete y en Anduva ante el Deportivo de la Coruña. Los penaltis también forman parte del juego y es otro aspecto a tener en cuenta ya que cualquier mínimo contacto en el área puede dar al traste con el trabajo realizado durante los noventa minutos.
El central Juan Gutiérrez regresa al equipo tras cumplir un partido de sanción. Tachi y Tomeo se encuentran entre algodones, mientras que el lateral Julio Alonso será baja por lesión. Egiluz, Juan y Víctor Parada cuentan con todas las papeletas para situarse en el centro de la defensa. La principal duda que pasa por la cabeza de Alessio Lisci se encuentra en la punta de lanza, en quién será el acompañante de Panichelli. Izeta fue de la partida el domingo, pero Butzke y Joel Roca dejaron sensaciones positivas, saltando al césped en la segunda parte, y podrían tener una oportunidad de saltar de inicio en tierras asturianas.
El partido espera el mejor ambiente en El Molinón-Quini. El Sporting ha vendido más de 3.000 entradas entre sus seguidores. La media de espectadores en el estadio gijonés supera los 21.000, aunque los dos últimos partidos había visto un descenso notable del número de aficionados en las gradas. La entidad rojiblanca espera recuperarlos este Viernes Santo porque el partido es atractivo y tiene mucho en juego.
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