“Pintaba todo para la fiesta, pero perdimos por dos errores propios”
El entrenador del Elche, Sebastián Beccacece, se muestra contrariado por la derrota después de haberse adelantado en el primer tiempo y haber sido inferior en el segundo.
Resumen de la derrota ante el Cartagena: “En la primera, debimos irnos con dos o tres goles de ventaja. Les dejamos con vida, y ellos entraron bien con las variables de los cambios. Nosotros buscamos un medio más definido, por detrás de sus dos referencias. El quiebre vino con el gol. Eso nos impactó mucho y no supimos jugar esos momentos de adversidad donde, si no puedes ganar, no debes perder. Es tan simple como eso. Un balón largo nos pilló mal posicionados, y eso tiene que ver con el entrenador que es quien dirige al equipo. Siento que regalamos puntos; no es que los tuviéramos, pero hicimos méritos en la primera para tener una tranquilidad superior para la segunda parte. Cuando nos marcaron, nos impactaron y no supimos reaccionar. Solo queda seguir trabajando y que esto sirva de aprendizaje”.
Explicación del cambio en la segunda parte: “En líneas generales, cuando el equipo deja de hacer lo que sabe, pierde mucho. Mi equipo dejó de hacer lo que mejor hacía, y esa es mi responsabilidad. Si no logro convencerles de jugar bien hasta el final, las cosas no son convenientes y hay que analizar por qué no hicimos lo de la primera parte”.
¿Pudo pesar la relajación o la confianza?: “El equipo perdió juego y dejó de fluir, atacar y gobernar; el rival lo fue sintiendo e intuyendo, y nos vimos obligados a un volante más posicional porque el espacio del medio era muy marcado. El primer gol me da bronca porque era una posición muy marcada, y el segundo en el desenlace estábamos en un espacio con más futbolistas, pero mal ubicados. Los errores se pagan y por eso tenemos una tarde triste. Pintaba todo para la fiesta, pero perdimos por dos errores propios no supimos gestionarlos”.
Faltó pegada: “En el primer tiempo buscamos mucho, pero faltó más concreción. Lo buscamos por todos los caminos. En el primer tiempo estuvimos bien, aunque nuestro pecado fue dejarles con más vida; en el fútbol nunca se sabe. En el primer tiempo, lo que no pudimos concretar fue algún gol más y ante la adversidad pueden aparecer estas sensaciones negativas. Debemos trabajar mucho si queremos ser aspirantes al sueño”.
Afición: “La calma la tenemos; no tengo dudas de quiénes son los futbolistas. Sé que son los del primer tiempo y no los del segundo. Esto es largo, y lo hablamos desde el primer día. Hay que estar más allá de eso y ver la idea. Dejamos de ser nosotros y pagamos las consecuencias; quizás si hubiésemos sido nosotros, se hubiese dado el mismo resultado; se puede perder, pero lo que más duele es que perdimos la forma. Hay que seguir con la convicción y la determinación; eso no se negocia. A pesar de la dificultad, tenemos una forma, y hay situaciones de juego que tienen que ver con la concentración. No estuvimos a la altura de lo que se esperaba. Ahora ya le damos la vuelta a la página, con buena ‘vibra’, no hay más. Pese al dolor de la gente, vamos a trabajar fuerte y duro para dar la cara”.