Omeruo abre un problema central
El defensa nigeriano se lesionó ante el Levante justo cuando estaba recuperando galones atrás. Llegó al partido con cansancio muscular. Idiakez, sin muchos reemplazos en su puesto.
La derrota del Leganés ante el Levante (2-1) tuvo como consecuencias no sólo el resultado y poner fin a la mala racha con la que los pepineros frenaron un inicio de Liga nefasto, sino que también secuelas físicas. Kenneth Omeruo se lesionó en lo que apunta a ser una dolencia muscular que amenaza con dejarlo fuera un par de semanas y, por tanto, perderse entre dos y tres jornadas. Al tratarse de dolencia leve, lo normal es que no haya parte médico oficial. El Leganés juega sus próximos tres partidos ante Tenerife, Racing de Santander e Ibiza, tres rivales directos (actualmente) en la zona baja de la tabla.
La baja de Omeruo es relevante en términos cualitativos y cuantitativos. Cualitativos porque el nigeriano, tras un comienzo titubeante de temporada y algún fallo individual serio (ante Las Palmas no achicó al tirador en el gol de Lemos), había recuperado la jerarquía y el tono.
Lo hizo, casualidades, tras su convocatoria con Nigeria (sin minutos) y con el cambio de sistema de Idiakez. El descanso y la modificación de su rol en la zaga le sentaron bien en área propia (menos errores, más contundencia) e incluso en el área ajena. Suyo fue el gol del empate que abrió la remontada ante el Cartagena, el primero que marcaba después del que le anularon en la jornada inaugural ante el Alavés en el 90′+4′.
Problemas de continuidad
Sin embargo, Omeruo, jugador de alta exigencia física y siempre en el alambre de los problemas musculares, se rompió después de sumar su tercera titularidad consecutiva. Idiakez, que ya expresó sus dudas sobre si repetir once como contra Cartagena y Málaga, apostó por los mismos hombres y en el caso de Omeruo, la jugada le trajo como consecuencias una lesión incómoda.
El técnico tuvo que agotar un cambio apenas iniciado el choque (minuto 21) y, de paso, se quedó sin un jugador en buen estado de forma y sin la opción de meter a Nyom, su reemplazo, como arma vigorosa para la segunda parte, como ya hizo en Cartagena.
Omeruo, que acabó el partido ante el Málaga con molestias sobre el césped, no se lesionaba con el Leganés en este tipo de dolencias en el verde desde el final de la campaña 20-21, cuando contra el Rayo Vallecano, allende Butarque, también se rompió y dijo adiós al tramo más importante de temporada. También en aquella ocasión coincidió con una jugada arriesgada. Garitano lo usó pese a que dos partidos antes se había perdido el choque ante el Sporting de Gijón tocado de molestias musculares.
Corto de efectivos
Ahora Idiakez, con esta baja, tendrá también un problema cuantitativo porque en el eje de la defensa no cuenta más que con tres centrales natos. A saber: Sergio, Jorge Sáenz y el propio Omeuo. Es cierto que en su nómina de zagueros hay hombres que pueden ejercer en esa posición. Uno es Nyom, más central que lateral esta temporada (el camerunés ahora se siente más cómodo en el eje) y el otro es Josema, de tendencia a ejercer más en el centro aunque Idiakez lo está reconvirtiendo por exigencias del guión en lateral recurrente por la izquierda.
Para recibir al Tenerife está por ver qué dibujo escoge el entrenador guipuzcoano. Apostar por defensa de tres centrales dejaría poco recursos en el banquillo en caso de otro infortunio similar en forma de sanción o lesión. Apostar por la defensa de cuatro permitiría a Idiakez tener más hombres de reemplazo en el banquillo, pero podría trastocar la esencia competitiva (y más hormigonada) que está tratando de implementar en esta nueva etapa pepinera de recuperación.