Marea blanquiazul en El Sardinero
Más 320 aficionados del Tenerife animarán a su equipo ante el Racing desde las gradas. Muchos de ellos se desplazarán desde la Isla, pero habrá de otros puntos de la península.
Enrique Santos Discépolo, dramaturgo argentino, supo describir a la perfección el sentir de los aficionados del fútbol. “¿Para qué trabaja uno si no es para ir el domingo y romperse los pulmones en las tribunas hinchando por un ideal? ¿Qué sería de un club sin el hincha?, ¡sería una bolsa vacía! El hincha es el alma de los colores, ese que no se ve, ese que da todo sin esperar nada”.
Esa definición encaja en los muchos fieles del Tenerife que en cada desplazamiento del equipo -con los gastos que ello conlleva por el tema de la insularidad-, están animando a su equipo. Y en Santander no será la excepción ya que se espera más de 320 blanquiazules en las gradas de El Sardinero.
En cada uno de los encuentros que los hombres de Garitano han jugado como visitante siempre ha habido aficionados tinerfeños presentes. En algunos más, como en Gijón, Ferrol o Elda, en otros menos, como Villarreal o Huesca, pero el equipo nunca ha estado solo.
Para este domingo, cerca de 180 personas viajarán desde la Isla y otros tantos se sumarán desde diferentes puntos de la península para arropar a los suyos ante el Racing. Hay quien recorrerá nueve horas en coche para estar presente. Miembros de la Peña Ibérica, Peña El Teide o Ginebrita tampoco quieren faltar a la cita.
Muchos tenían este encuentro marcado en su calendario ya que la temporada pasada cayó en viernes y la gran mayoría no pudo acudir. Además, como es casi habitual en los partidos a domicilio, los desplazados han quedado en un bar de la zona para vivir la previa y luego asistir todos juntos, cual marea blanquiazul, hacia el estadio. Porque ellos son el alma de los colores, los que no se ven y los que, muchas veces, no reciben nada a cambio, pero siguen allí.