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LEGANÉS

Leganés, alerta de Déjà vu

Con 0 puntos de 6 posibles, el equipo bordea el mal arranque de la temporada pasada (1 de 9) y repite problemas del pasado: limitación en defensa, falta de pegada, fichajes tardíos…

21/08/22 PARTIDO SEGUNDA DIVISION
REAL OVIEDO - LEGANES
HUGO RAMA CISSE
ELloy AlonsoDiarioAS

Apenas se ha iniciado el campeonato y la inestabilidad ya rodea Butarque. Hay alerta de déjà vu en el Leganés. Con dos partidos disputados y dos derrotas en el casillero, el estreno de la era Imanol Idiakez recuerda al mal comienzo de hace justo un año, cuando Asier Garitano y sus muchachos arrancaron sumando apenas un punto de los primeros nueve en juego frente a tres de los cuatro ascendidos a la categoría. A saber: Real Sociedad B (1-0), Burgos (0-0) e Ibiza (1-2).

Aquel traspiés inaugural provocó un correr trastabillado en el resto de la temporada que, aunque Nafti salvó con números de playoff, dejaron amargo sabor de boca en el balance global. Ahora, con una plantilla también por construir como sucedió entonces, pero peores expectativas económicas con las que blindar al equipo, el pesimismo empieza a cundir en el entorno del equipo.

Un “ridículo” gol en contra

En el apartado deportivo el Leganés ha repetido pecados pasados. Problemas defensivos ante el Alavés y despistes graves ante el Oviedo derivaron en sendas derrotas que, especialmente en el caso de los ovetenses, deja sabor amargo. “Hemos encajado un gol ridículo de un saque de banda a favor nuestro”, se quejó Idiakez en sala de prensa en el Tartiere. El entrenador creía que el punto era factible, pero que faltaron “ser listos en los detalles” para amarrar un empate que seguramente habría cohesionado más al grupo y su idea de fútbol.

Pero entonces llegó la jugada de marras, un saque de banda a favor del Lega que acabó en pérdida cerca del área. Lucas, lateral derecho del Oviedo, recogió el esférico casi en su área e inició una carrera “de 80 metros” (Idiakez dixit) que siguieron, pero de lejos, hasta tres pepineros. Arnáiz arrancó al sprint pero, tras 30 metros, abandonó por fatiga. Rubén Pardo acompañó la jugada sin atreverse a encimar al defensa. Josema encaró al carrilero rival, pero tocado físicamente (se le nota cojear mientras trata de alcanzarlo) no pudo si quiera echársele encima.

Borja Bastón, festeja la penalización de la falta dentro del área que dio lugar al 1-0.
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Borja Bastón, festeja la penalización de la falta dentro del área que dio lugar al 1-0. ELloy AlonsoDiarioAS

Finalmente el centro de Lucas fue forzado, raso y sin mucho peligro. Un balón que parecía fácil de despejar hasta que rondó el área donde Borja Bastón se adelantó a Perea. El medio centro, desdibujado todo el partido, llegó tarde y con fuerza desmedida, lo suficiente como para provocar un penalti “que no debimos hacer”, dijo luego Idiakez. Ahí nació el gol y todo lo demás: desde las reacciones exacerbadas de Raba hasta la roja récord de Avilés. Se la sacaron a los 2 minutos y 25 segundos de haber salido al césped desde el banquillo.

Sin remates entre palos

Como hace un año, el Leganés muestra carencias defensivas, pero sobre todo problemas en ataque. Si ante el Alavés el Leganés remató mucho (hasta 12 veces) pero sin tino (sólo dos remates entre palos) frente al Oviedo la escasez fue mayor si cabe, con cinco remates: dos bloqueados y tres fuera.

Alineación con la que formó el Leganés en Oviedo
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Alineación con la que formó el Leganés en OviedoEloy AlonsoDiarioAS

El Leganés no tiró entre palos, aunque tuvo dos acercamientos peligrosos, los dos fabricados por un aislado Juan Muñoz: el primero, un remate a la media vuelta en la primera mitad y el segundo, una jugada individual que remató Miramón casi en área chica, pero se topó con un defensa. El Oviedo, sin embargo, remató once veces: cinco entre palos, cuatro fuera y dos bloqueados.

Fichajes para taponar urgencias

Para intentar solventar estos problemas el Leganés tiene 10 días para traer pegada arriba. Un delantero y un extremo son dos de las prioridades. También un medio centro que pueda suplir a Gaku cuando se vaya al Mundial (en Oviedo no jugó por molestias) amén de un lateral o un portero.

Algo parecido a lo que sucedió la pasada temporada, cuando hasta cinco futbolistas (Fede Vico, Bautista, Rubén Pardo, Bruno y Lazar Randjelovic) firmaron con el campeonato ya en marcha. Un sexto, Borja Garcés, firmó apenas dos días antes de iniciar el curso, pero no pudo participar hasta varios partidos más adelante por molestias musculares.

Por ahora, el Leganés actual ya ha incorporado un futbolista con el curso iniciado (Josema) y de cumplir las expectativas, Idiakez podría tener entre tres y cinco más en las próximas semanas, plazos que no ayudan a un equipo este curso lastrado por el límite salarial.