Las rutinas de García Pimienta
“No nos salimos de lo que nos trajo hasta aquí”, dice el entrenador de Las Palmas. “Trabajamos cada día para jugar estos partidos”, analiza antes del Alavés
Desde su llegada a Gran Canaria, allá por el mes de enero de 2022, siempre se apoyó García Pimienta en la figura de Richi Serrés, coach destacado en el ámbito deportivo que trabaja día a día con la primera plantilla de Las Palmas. Entre el profesional de la psicología y el jefe del banquillo trazaron una línea a seguir que, a día de hoy, está más que avalada por los resultados: playoff la temporada pasada tras una hercúlea remontada y ahora, a 90 minutos de jugar en Primera División.
La figura de Serrés se funde con las de los futbolistas y el batallón de trabajadores del club que, día a día, se preocupan de que los jugadores solo se preocupen de entrenar y competir al máximo de sus condiciones, tanto deportivas como psicológicas. No hay que dejarse nada atrás en la pelea por el ascenso. Mucho menos las pautas de trabajo que tienen a Las Palmas en tan privilegiada situación. “Si me muestro tenso o nervioso, o hacemos tareas diferentes, nos saldríamos de la línea que nos ha traído hasta aquí”, insistió esta mañana el propio García Pimienta. Más allá de que el equipo se concentre esta noche, el resto se mantiene igual por mucho que mañana venga el Alavés a disputarle el ascenso a su equipo. “Es importante que cenemos y descansemos todos juntos. El resto se queda igual: entrenaremos hoy y tendremos activación mañana por la mañana”, aseguraba el jefe del banquillo grancanario.
Cuesta imaginarse a García Pimienta alzando la voz por mucho que la situación tal vez lo requiera. Siempre calmado, asegura: “Estamos mentalizados”. Se refiere, claro, a la puesta en común de los sentimientos de sus futbolistas, tan importante siempre la psicología, ante el duelo más importante de la carrera deportiva de la mayoría de ellos. “Todos trabajamos para disputar este tipo de partidos.”, recalcó el entrenador de Las Palmas. Por tanto, también deslizó que el entrenamiento mental de sus jugadores de cara a lo que se les viene mañana no empezó esta semana: “Con la plantilla hemos ido trabajando a nivel psicológico para cuando llegara este momento. Nadie le ha regalado nada a mis futbolistas, que han demostrado estar preparados para este tipo de partidos sin haberlos jugado antes. Detrás de nosotros hemos tenido a mucha gente trabajando en esto”.
Todo este “trabajo” va enfocado a los 90 minutos de mañana, que deberán jugarse contra un Alavés al que sí que solo le vale la victoria. “Tiene un presupuesto increíble y un equipo de Primera División”, aseguraba García Pimienta esta mañana, que insistió también en que las únicas bajas con las que cuenta son las de los lesionados Sidnei y Vitolo. “El partido debe jugarse como nosotros queramos. Tenemos una oportunidad increíble y hay que ser protagonistas con el balón y trabajar mucho cuando lo perdamos”, insistió el entrenador barcelonés. Insiste en el juego de posesión y posición que tanto le gusta desde sus tiempos mozos en La Masía.
Más allá de eso, así desgranó las principales virtudes del Alavés: “Es un equipo que tiene mucha capacidad para asociarse con la pelota, pero también está muy cómodo sin ella. Salva Sevilla, Guridi Toni Moya… tienen mucha calidad. Por ejemplo: en la ida quedamos 1-1 teniendo nosotros casi el 70% de posesión, y a falta de cinco minutos nos salvó Valles con un paradón. El Alavés es un equipo solidario que provoca que te equivoques. Además, domina muy bien el balón parado”.
Reto personal.
García Pimienta se enfrenta a su reto de mayor envergadura desde que se despidió del Barcelona. “Yo también he luchado mucho por estar en estos partidos. Las lesiones me lo impidieron, pero al menos sí pude jugar algunos en Primera División”, insistió antes de recordar: “Cuando sales del Barça vas a otro mundo, pero tuve la suerte de venir al mejor equipo de Segunda División, cuya idea de juego se asemejaba además mucho a la mía. Estamos en el camino, creo que todo saldrá bien”.
Renovaciones.
También se refirió Pimienta a la reciente renovación de Kirian, que se quedará en Las Palmas al menos hasta 2026. “El éxito más rotundo de esta temporada fue que volviera a jugar, y miren cómo lo está haciendo”, escenificó su entrenador. “Tiene que estar muy contento. Desde el primer momento ha querido estar aquí, y además ha luchado mucho por este contrato: firmó tres temporadas más, dando igual que Las Palmas esté en Segunda que en Primera División”.
Con la suya fue más escéptico, aunque alguna pista deslizó. “Es algo que no me ha descentrado en ningún momento. Lo importante no es eso sino que Las Palmas esté en Primera División”, insistió. Sus deseos, que se sepa, de momento no son órdenes: “Ojalá pueda estar muchos años aquí, me encantaría. Sería una buena señal tanto para mí como para el club”.