El adiós de Kochorashvili: “Siempre seré granota”
El internacional georgiano, que la próxima temporada jugará en el Sporting de Portugal, mandó un mensaje a la afición del Levante.
Giorgi Kochorashvili se despide de la afición del Levante. El internacional georgiano, que la próxima temporada jugará en el Sporging de Portugal, mandó un mensaje al levantinismo cargado de sentimiento a través de sus redes sociales para decir adiós, según sus propias palabras, al club que ha cambiado su vida.
“Lograr el ascenso y sentir esa alegría junto a vosotros fue uno de los momentos más felices de mi vida. Gracias por confiar en mí y por hacerme sentir que no estaba solo. Llevar este escudo en el corazón ha sido un honor que siempre llevaré conmigo. Siempre seré granota en el alma y en el corazón”, aseguró Kocho en su trabajado vídeo de despedida.
Kochorashvili, al que se le ha visto entrenándose con Xavi Grande este verano, con el que comparte representante, comenzará en breve su nueva aventura en Portugal. El centrocampista deja en las arcas del club 5,5 millones de euros más dos en variables por su traspaso. El Levante también se reservó un 12,5% de una futura plusvalía.
El georgiano llegó al Levante en 2019 para formar parte del filial granota, y en 2020, esa misma temporada, vivió su debut en Primera División frente al Athletic Club de la mano de Paco López. Sin embargo, antes de despegar definitivamente en el primer equipo tuvo que demostrar su valía como cedido en el Castellón, donde jugó una temporada cedido rozando el ascenso a Segunda División con el conjunto albinegro.
Hoy digo adiós al club que me cambió la vida.
— Kochora14 (@kochora14) June 19, 2025
Gracias, granotas, por tanto.
Siempre uno de los vuestros. 💙❤️ @LevanteUD pic.twitter.com/bxOCejynSQ
Desde entonces, Kochorashvili fue ganando importancia en el Levante y, tras una brillante Eurocopa, esta temporada se estableció como uno de los pilares sobre los que Julián Calero edificó el equipo que ha conseguido el ascenso, con seis goles y cuatro asistencias en su casillero, y jugándose el físico en el tramo final de la temporada pese a que su traspaso ya era una realidad.
Su hoja de servicio en sus seis años en el club, pese a que uno de ellos estuvo a préstamo en el Castellón, deja más de 100 partidos con la camiseta del Levante (66 con el primer equipo y 44 con el filial).
“No hay palabras suficientes para expresar lo agradecido que estoy por todo lo que hemos compartido. Desde el primer día sentí que formaba parte de una gran familia con la ilusión de jugar en una de las mejores ligas del mundo. Fue un camino de piedras, heridas y de momentos complicados. Vuestra entrega y cariño me enseñaron lo que significa ser parte de esta afición tan especial”, zanjó Kocho, al que la afición despidió con honores tras marcharse del Levante por la puerta grande. Con el equipo de vuelta en Primera División. “No es un adiós, es un hasta luego”, recalcó durante la celebración del título en el Ciutat de València.
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