Felipe Miñambres, ante su reestreno en el Ciutat de València
El Levante homenajeará a las víctimas del incendio de Campanar frente al Sporting de Gijón, que no consigue el triunfo en Orriols desde hace casi 24 años.
Felipe Miñambres vuelve a enfundarse el chándal en la banda del Ciutat de València 511 días después, tras su reestreno en el banquillo granota con derrota en el Carlos Tartiere frente al Oviedo y con el equipo sumido en un preocupante decimotercer puesto en la clasificación.
Lo hace ante un Sporting de Gijón que no consigue el triunfo en Orriols desde hace casi 24 años (sigue el partido en directo en AS.com) y que ha perdido en sus dos últimas salidas, pese a que sigue en puestos de playoff, el gran anhelo de los levantinistas que ya van seis puntos por detrás pese a contar con un partido menos, que se disputará el miércoles en el feudo granota frente al Andorra por el partido aplazado debido al trágico incendio sucedido en el barrio de Campanar. De hecho, el Levante aprovechará el encuentro para homenajear a la víctimas, especialmente a Ramón Ferrer Serra, abonado del club durante 23 años, que perdió la vida entre las llamas.
En lo deportivo, Felipe recupera a Álex Valle, que arrancará previsiblemente el encuentro desde el banquillo por el carrusel de tres partidos en seis días naturales que está por venir. El astorgano, que en su primera corta etapa en el banquillo recuperó la figura del mediapunta, parece haberse decantado por la dupla formada por Fabrício y Bouldini en la delantera, con Carlos Álvarez y Brugui en las bandas. Pese a ello, su once sigue siendo una incógnita. Más con una importante carga de partidos por delante en el corto plazo, que podría definir definitivamente el objetivo del Levante, cada vez más alejado de su objetivo, más por sensaciones que por números, de tratar de pelear por el ascenso. Cabe recalcar que el equipo no gana desde el primer partido del 2024, frente al Albacete.
El Sporting, por su parte, se presenta en el Ciutat de València dispuesto a llevarse tres puntos muy importantes en la carrera por estar en la lucha final por el ascenso. Sin embargo, los rojiblancos llegan a un escenario del que suelen salir mal parados y en el que no ganan desde hace casi 24 años. Además, las dos últimas salidas de esta temporada se han resuelto con derrotas. El equipo de Ramírez necesita, por tanto, cambiar esa dinámica.
No se esperan grandes cambios en la alineación sportinguista, aunque la primera duda se presenta en la portería. Es probable la vuelta de Rubén Yáñez, que ha entrado en la convocatoria adelantando de forma notable los plazos de recuperación de la lesión que sufrió hace un mes en Zaragoza. La trascendencia del encuentro de cara al futuro puede llevar a Ramírez a volver a confiar de inicio en uno de los mejores guardametas de la categoría.
El resto del equipo apunta al mismo de la pasada jornada frente al Albacete, con Fran Villalba como principal referencia por su buen estado de forma. No obstante, casi no ha habido semanas sin que el once del Sporting sufriese alguna variación y ello no se descarta nunca en los planes que Miguel Ángel Ramírez siempre guarda con celo.