El Zaragoza lo gana todo
Un gol de Toni Moya a once minutos del final decide al triunfo del equipo aragonés frente a un Cartagena que jugó casi toda la segunda parte con un jugador menos por expulsión de Alcalá.
El Real Zaragoza se impuso por 1-2 al Cartagena, que jugó prácticamente toda la segunda parte con uno menos por expulsión de su central Alcalá, en su cuarto amistoso de preparación, el segundo de la trilogía en su concentración en el Pinatar Arena y el de mayor exigencia hasta ahora de la pretemporada 2023-24. Puche abrió el marcador, empató Ortuño y Toni Moya firmó a once minutos del final la victoria del equipo aragonés, que este verano cuenta sus partidos por triunfos.
Ante un rival de la misma categoría, Escribá presentó un once con Bakis y Fran Gámez, ausentes el martes frente al Murcia por unas leves molestias musculares, juntó por primera vez en el doble pivote a Francho y Marc Aguado y sólo alineó de inicio a tres jóvenes del filial: Vaquero, Juan Sebastián, una de las sorpresas más gratas de este verano, y Cortés.
La primera parte fue igualada. El Zaragoza, paciente en la construcción, se metió pronto en el partido y golpeó enseguida por mediación de Puche. El gol fue de verdadero tiralíneas, con pase muy profundo de Fran Gámez, centro preciso de Maikel Mesa, maniobra de arrastre de Bakis y remate certero de Puche desde el punto de penalti. Sin embargo, la alegría duró muy poco, apenas cinco minutos, porque pasado el primer cuarto de hora, el ex zaragocista Ortuño, al que no se le va el apetito, restableció el empate al cabecear bombeado una falta sacada por el holandés Hevel que se ‘tragó’ literalmente Rebollo. El portero se enmendaría a medias en el minuto 23, cuando salvó un mano a mano ante Hevel, tras un gran servicio de Juan Carlos Real.
El Zaragoza mantuvo cierto control del juego, pero no respondió hasta después de la pausa de hidratación, cuando Francho disparó de zurda por encima del larguero, tras una recuperación de Maikel Mesa, hoy en labores de intendencia.
El equipo aragonés juega mañana frente al Stade de Reims francés, por lo que Escribá, a diferencia de los tres primeros amistosos, no sólo no recurrió al habitual carrusel de cambios, sino que no movió el banquillo en el descanso. Pero la segunda parte estuvo marcada, sin duda, por la rápida expulsión, con roja directa, de Alcalá por una patada a Bakis, tras una falta previa del central del Cartagena sobre el ariete turco, lo que obligó a Víctor Sánchez del Amo a recomponer líneas sacrificando a Juan Carlos Real por el argentino Musto.
Con uno más, el Zaragoza pasó a dominar con insistencia frente a un replegado Cartagena y el primero en probar fortuna fue Cortés, activísimo, con un disparo ajustado al poste que conjuró Marc Martínez.
Pasada la hora de partido, Escribá metió cuatro cambios de golpe: se fueron Cortés, Puche, Maikel Mesa y Puche y salieron Iván Azón, Sergi Enrich, en sus primeros minutos con el Zaragoza, Cuenca y Aragüés. Sergi Enrich tuvo un estreno prometedor, especialmente con un impresionante remate de cabeza en el 67′ que obligó el guardameta del Cartagena a la parada de la noche.
En el tramo final, en el que el Zaragoza no dejó de apretar, también entraron Nieto, Luna, Jaume Grau y Toni Moya, que puso su firma a la victoria a once minutos del final al aprovechar muy oportuno un extraordinario cañonazo de Cuenca al larguero.
Ya en tiempo de descuento, pudo aumentar su triunfo el Zaragoza, pero el disparo de Jaume Grau se estrelló en un poste.
Cuatro amistosos, cuatro victorias.
RESUMEN
Real Zaragoza: Rebollo; Fran Gámez (Luna, 73’), Lluís López (Borge, 77’), Vaquero, Juan Sebastián (Nieto, 73’); Puche (Aragüés, 62’), Francho (Toni Moya, 73’), Marc Aguado (Jaume Grau, 73’), Cortés (Cuenca, 62’); Maikel Mesa (Sergi Enrich, 62’), Bakis (Iván Azón, 62’).
Goles: 0-1 (11’): Puche. 1-1 (16’): Ortuño. 1-2 (79’): Toni Moya.
Árbitro: Lax Franco (Comité Murciano). Expulsó con roja directa a Alcalá (49’). Mostró tarjetas amarillas a Maikel Mesa (23’), Luis Muñoz (44’) y Calero (76’).
Campo: Pinatar Arena. 1.000 espectadores, con presencia de más de un centenar de aficionados del Zaragoza veraneantes en el Mar Menor.