El tremendo impacto de Chupete
El máximo goleador nacional en las cinco principales categorías: 28 goles en 40 partidos. Cuatro goles y siete puntos, balance en el primer equipo, y doblete ante el Sporting como consolidación.
Chupete es otro ser de luz que sale de La Academia del Málaga CF. El delantero del futuro se llama Carlos Ruiz Rubio (Córdoba, 2004), killer de profesión y una aportación fundamental para adelantar la salvación del Málaga, que ante los problemas, y un Sergio Pellicer al que no le tiembla el pulso, da más peso a los cachorros. Lo hizo en Tarragona contra las cuerdas con Ochoa y Cordero, y el de Nules se la jugó con ‘Chupe’, el nombre que preside su camiseta.
El máximo goleador nacional en las cinco principales categorías del fútbol español. 28 goles en 40 partidos la criatura. 24 goles en 23 partidos en el Atlético Malagueño (el mejor porcentaje nacional), la diferencia en el filial y ese ascenso a Segunda RFEF, se le quedaba enana la Tercera RFEF, un dominio insultante. Ese registroen el Malagueño es el mejor porcentaje goleador que se contempla en España. Ni Lewandowski, ni Mbappe, el hombre gol de esta temporada es Chupete.
Dándole continuidad a ese impacto en el primer equipo. Debutó en septiembre en un Granada-Málaga CF, cuando su nombre apenas retumbaba. Tuvo ese proceso en ese aterrizaje en el fútbol profesional, pero ante una sequía goleadora galopante, los fiascos de Roko y Castel, y un mercado invernal donde el Málaga se quedó inmóvil, asumió la delantera a la fuerza en esta segunda etapa de curso. Por necesidad y un vuelco a la narrativa, el fichaje se llamaba Chupete, y al club, ante una solución disfuncional y arriesgada, le ha salido bien. No era esa la idea, sino que permaneciera en el filial y cocer esa entrada al primer equipo a fuego lento. No le ha pesado: 4 goles en 17 partidos, traducidos además en siete puntos.
Marcó en el empate ante el Deportivo (1-1) el 11 de enero en La Rosaleda, con un Málaga espeso y KO, emergió el canterano desde el banquillo para dar un punto. Ya de titular y jefe de esa delantera, el gol frente al Castellón (1-0) para dar una bomba de oxígeno tras sacar un punto en Ipurúa (2-2). Y su doblete con el Sporting, que supone su consolidación como jugador importante del primer equipo. Y algo más. Muy especial lo que se respiró en La Rosaleda en torno a Chupete. Goleador, pero por encima un delantero total, que hace de todo, cada día más completo. Ha tenido partidos de notable pese a no marcar, por ese trabajo invisible que no cuantifica.
“Me alegro mucho por él. El chico está haciendo un gran trabajo y la transferencia del entrenamiento a la competición. Pero me gusta ver que los compañeros te hacen mejores, es muy importante. Ahora lo van a poner por las nubes, pero le voy a poner los pies en el suelo a partir del martes. Es muy importante que esa gente joven tenga ese proceso. Y estoy muy contento, aunque lo estaría igual si hubiese marcado Dioni o Roko. Tener ídolos del barrio es muy importante, pero también ser conscientes de que queremos más. La exigencia es enorme. Ha tenido su proceso, pero me voy a quedar con las cosas positivas”, cariñosas palabras de Pellicer. Dos jornadas más de rodaje y experimentar para el futuro.
El Málaga activó su cláusula en enero para renovar el contrato de Chupete hasta 2028 y formará parte de la primera plantilla exclusivamente en la 25/26. Pero el mercado es volátil, el fútbol no espera, y un delantero con estos registros… El club podría verse obligado a copiar la fórmula de Izan Merino, una revisión de contrato acorde a su valor. Le toca a Loren Juarros.
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