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ESPANYOL

El Espanyol se desintegra

Solo ha ganado dos de los últimos diez partidos. Las comparaciones son odiosas, pero el curso del ascenso (2020-21) sumaba 11 puntos más que ahora tras las primera 21 jornadas.

Actualizado a
Braithwaite celebra un gol con el Espanyol.
GORKA LEIZADiarioAS

Adaptando unas palabras de Ramis, este Espanyol parece que camina sobre arenas movedizas. El conjunto perico no está logrando los resultados esperados y el cambio de entrenador, Ramis por Luis García, no está acabando de traer los resultados anhelados. Los datos no mienten y sí escuecen porque son preocupantes. En las diez últimas jornadas de Liga, el Espanyol solo ha sido capaz de ganar dos partidos, ante Elche y Alcorcón. El resto, tres derrotas (Leganés, Sporting y Oviedo) y cinco empates (Eibar, Huesca, Zaragoza, Andorra y Burgos).

Un equipo como el Espanyol, recién descendido y con jugadores en la plantilla como Pacheco, Aguado, Puado, Pere Milla y Braithwaite, debe aspirar a lo máximo. Y tras la primera vuelta de campeonato, la realidad es que su sitio, como mucho, es el playoff. Nada de ascenso directo. Y eso que los rivales le han dado oportunidades. Pero claro, sumar solo dos victorias en las diez últimas jornadas ha sido un lastre. Desde la jornada 12 que el bloque perico no está entre los dos mejores equipos de la categoría y la afición empieza a impacientarse porque vislumbra un futuro poco halagüeño. Ante el Burgos fueron una constante los gritos de “directiva, dimisión” y en 2024, durante la segunda vuelta, no habrá margen de error. Actualmente se suman 34 puntos. La proyección, en una temporada completa, sería de 68 puntos, que serían incompatibles con lograr el objetivo. La pasada campaña, el Albacete acabó sexto con 67. Y hace dos, la 2021-22, fue el Girona con 68.

Un sudor frío recorre el cuerpo de los aficionados blanquiazules. Y no es para menos. El equipo necesita reaccionar y firmar una segunda vuelta de notable. Tocará bajar al barro de verdad. Se debe cortar la sangría porque este Espanyol es muy distinto al que logró el ascenso la campaña 2020-21. Empezando por los jugadores y siguiendo por las sensaciones y ritmo de puntuación. Ahora, tras 21 jornadas, se suman 34 puntos. Y hace tres cursos, con los mismos partidos, 45. Se era líder. 11 puntos de diferencia para una plantilla que tiene el mismo objetivo. Y no es culpa del poder ofensivo porque este año se llevan dos goles más (34-32), sino que la hemorragia está en defensa. Actualmente se han recibido 14 goles más. Durante el mercado de invierno, muchas de las carpetas estarán formadas por centrales. Vital recuperar la seguridad y la confianza.

Javi Puado es uno de los futbolistas que estuvo en aquel ascenso la temporada 2020-21 y que sigue en la plantilla. Tiene ADN perico y sabe qué puede sentir la afición. No se escondió “hay que dominar más, tener más ambición por ganar y no es fácil. Parece que lo sea, pero somos el Espanyol y hay que dar un paso adelante. En este 2023 la afición tendrá un sabor muy agridulce, o malo directamente. Es un año en el que descendemos de Primera y ahora no nos están saliendo las cosas como queremos. Pero tengo plena confianza en este equipo y en darle la vuelta a la situación”. Ahora, en Navidad, a descansar y focalizarse que en 2024 toca sacar de verdad los remos y enderezar el rumbo.

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