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MIRANDÉS

El Mirandés va adquiriendo la madurez necesaria

El equipo rojillo ha ido ganando en confianza desde la derrota en Valladolid. Los jabatos han sumado 12 puntos en los siete últimos encuentros disputados.

Miranda de Ebro
Álvaro Sanz, jugador del Mirandés.

Tras un titubeante inicio de temporada, el Mirandés se ha situado en la mitad de la tabla, aventajando en seis puntos a la zona de descenso y también encontrándose a seis de los puestos de playoff. Nadie pierde el norte en el conjunto jabato cuyo objetivo principal no es otro que la permanencia en la categoría. A los pupilos de Alessio Lisci les costó arrancar con una plantilla casi renovada en su totalidad y que necesitaba tiempo para conocerse sobre el césped. “Pasó porque el Mirandés es un equipo que se va rehaciendo poco a poco. Al principio nos estábamos conociendo. A medida que ha pasado el tiempo, el equipo se ha hecho y el entrenador nos conoce más. Ahora de verdad tenemos que dar el callo en Anduva, pero también en los partidos fuera de casa”, asegura el capitán Álvaro Sanz.

Las desconexiones eran habituales en los primeros partidos del campeonato. El conjunto jabato recibió tres goles en diez minutos en el duelo ante el Sporting en El Molinón. Frente al Andorra estuvo a punto de dejar escapar la victoria con dos tantos visitantes que igualaron el choque en el tiempo añadido. Una semana más tarde fue el Amorebieta el que anotó dos dianas en menos de 60 segundos. El gran toque de atención llegó en el estadio José Zorrilla cuando los rojillos recibieron tres goles en la recta final después de haberse puesto en ventaja en el inicio de la segunda mitad.

A partir de ahí se produjo la reacción del cuadro mirandesista, que ha conseguido 12 puntos de los últimos 21 en juego, lo que le ha permitido alejarse de la zona de descenso. Desde entonces el único pero llegó ante el Racing de Ferrol con dos nuevos tantos en tan solo cinco minutos, aunque el equipo tuvo ocasiones de sobra como para voltear el marcador tras el descanso. Anduva es una asignatura pendiente para los hombres de Lisci que quieren, de una vez por todas, hacer de su feudo un fortín: “Nuestro objetivo es sacar los seis de seis en Anduva. Queremos devolver la confianza a la afición en Anduva porque quizá no empezamos muy bien y queremos darles una alegría”.

El triunfo contra el Oviedo puede suponer un punto de inflexión que debe tener continuidad este próximo domingo con el Racing de Santander. “Hasta el final de temporada iremos creciendo sobre todo individualmente como jugadores porque este equipo explota las virtudes de cada uno. Y como bloque nos encontramos bien y cómodos, pero la clave es competir. Paciencia al principio hay que tener en todos los sitios. Hemos sacado 22 puntos que no está nada mal”, destaca el centrocampista aragonés.

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