Rúben Neves frustra a Míchel
El gol del portugués desde los once metros devolvió la igualdad a un partido de alto voltaje hasta el pitido final.

La segunda jornada de la Saudi Pro League nos presentó un partidazo entre dos de los candidatos a llevarse el mayor título del fútbol árabe, el Al Hilal de Simone Inzaghi y el Al Qadsiah, comandado por Míchel.
Al Hilal salió con el esquema de 4-2-3-1, que en facetas defensivas acaba por convertirse en una defensa de 5, con Rúben Neves situándose como un tercer central, con el que el equipo de Inzaghi consiguió tan buenos resultados en el Mundial de Clubes. La principal novedad en el conjunto de Riad para este partido fue el debut de Theo Hernández, que llegó este verano procedente del Milán a cambio de 25 millones de euros, tras ser pretendido por diferentes gigantes europeos.
Por su parte, Míchel alineó un clásico 4-4-2, cargando el área rival con Quiñones y Mateo Retegui en una doble punta que se demostró letal en el debut liguero del Al Qadsiah. El conjunto de “los caballeros del Este” también presentaba dos novedades en el partido: el debut de Christopher Bonsu Baah (fichado por 17 millones de euros) y de Julian Weigl (por quien pagaron 8 millones de euros al Borussia Mönchengladbach).
El partido inició con cierto control ofensivo del Al Qadsiah, que acabaría tirando el muro abajo en el minuto 7. Tras un rechace en el área, Bonsu Baah adelantó al equipo de Khobar, con un remate seco ante el que Yassine Bono no pudo hacer nada.
Tras el tempranero gol, Al Hilal tomó la iniciativa ofensiva, aunque sin generar excesivo peligro, recurriendo al centro lateral y a los remates de larga distancia. No sería hasta el minuto 30 cuando llegaría la primera gran ocasión: un remate de cabeza de Sergej Milinkovic-Savic que detuvo con una gran parada el portero internacional belga Koen Casteels.
A escasos minutos de cerrarse la primera mitad, en el minuto 39, Kalidou Koulibaly asestó un codazo a Nacho Fernández, capitán del Al Qadsiah, que le dejó tendido en el suelo, aunque sin mayores consecuencias.
Ya en la segunda parte, Al Hilal golpeó primero, tardando tan solo 4 minutos en poner las tablas en el minuto 49. Tras una gran jugada por la derecha de Malcom (que hoy disputó su partido número 100 con el club), Darwin Núñez puso el 1-1 con un remate de zurda.
Tan solo un minuto después, el Al Qadsiah volvería a adelantarse con un gran gol de Julián Quiñones, tras un pase de fantasía de Nahitan Nández, que devolvía la esperanza a los de Míchel.
Sobre el minuto 70, Bonsu Baah cometió penalti sobre Milinkovic-Savic tras una entrada innecesaria, llegando sobre revolucionado a la cobertura defensiva. Tras revisarlo en el VAR, el árbitro español Juan Martínez Munuera señaló la pena máxima, que Rúben Neves transformó en el 2-2.
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Desde ese momento, el Al Hilal volcó su juego en campo rival, acumulando llegadas y controlando las ocasiones, pero sin la precisión suficiente para romper la resistencia del Al Qadsiah. La intensidad se mantuvo hasta el pitido final, pero el marcador no volvió a moverse: empate 2-2, reflejo de la igualdad y competitividad de ambos conjuntos en este inicio de la Saudi Pro League.
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