Riera se lleva el ‘Derbi Eterno’ y los ultras le piden perdón
El Olimpija de Ljubljana le ganó in extremis al Maribor. El equipo del técnico español domina Eslovenia y los ultras le pidieron excusas por haber arruinado su presentación en julio.
Es un fin de semana de clásicos y en Eslovenia también vivieron intensamente el suyo el sábado. El Večni Derbi (el Derbi Eterno en esloveno) tuvo un final explosivo. El Olimpija de Ljubljana de Albert Riera se midió con el Maribor en un partido que se resolvió en el último momento para la apoteosis local. En el minuto 92, Mario Kvesić anotó desde el punto de penalti para la undécima victoria del Olimpija en la liga y para hundir un poco más al eterno rival. El equipo de Riera casi dobla en la tabla al que debía ser su alternativa. Es líder con 33 puntos, ocho más que el Koper, su inmediato perseguidor. Y hay que mirar muy abajo para buscar al Maribor, cuarto con 17 puntos. Fue una explosión de emociones. Los dragones del Olimpija festejaron el triunfo alrededor de un muy orgulloso Albert Riera, que llegó a un club en dificultades y con una crisis social en curso. Pero ha conseguido unir y convencer a todos. Los ultras arruinaron en julio su presentación. La propiedad había prescindido de Prosinecky y eso no había gustado. Se presentaron en la conferencia de prensa para una imagen que dio la vuelta al mundo.
Pero eso es historia y el sábado, después del undécimo triunfo del técnico español en el campeonato, las emociones se desataron. Riera festejó con sus jugadores y se acercó a la grada para hacer partícipe del triunfo a su afición. Fue cuando recibió un gesto de los ultras del club. Le pidieron perdón por el recibimiento de julio. A renglón seguido, y junto a Timi Max Elšnik el capitán del equipo, agarró un megáfono y cantó junto a los aficionados. Riera ha ilusionado a un decaído Olimpija. El equipo gobierna en su país y en Europa cayó en la ronda previa de la Conference después de sufrir un errático arbitraje en el partido de ida frente al Sepsi rumano. Pese a ello casi le dieron la vuelta en la vuelta, donde perdieron en los penaltis.
“Un derbi es como una final. No se trata de cómo juegas, se trata de ganar. Me gustaría que todos los partidos fueran así, con este ambiente. Respeto a los jugadores. Somos un equipo que va a por los tres puntos, sin esperar los errores del rival. Yo preparo la táctica, todo lo demás depende de los jugadores. Ellos marcan la diferencia con su calidad. Somos un equipo que siempre va a ir por los tres puntos. Da igual contra quién juguemos y dónde. Aunque juguemos contra el Real Madrid o el Barcelona, iríamos por los tres puntos. Hoy hemos sido el único equipo en el campo”, analizaba Riera. Otro técnico español que está de moda lejos de nuestras fronteras.